Xerez CD

El XCD, con los derechos federativos embargados

  • El Deportivo no podrá reforzarse para la 2ª vuelta salvo que abone la cantidad pactada con la Andaluza por las deudas con los entrenadores

Los xerecistas no podrán entrenar en el Sánchez Portella de Torrecera por una deuda con Endesa.

Los xerecistas no podrán entrenar en el Sánchez Portella de Torrecera por una deuda con Endesa. / pascual

Serios apuros a la vista para el Xerez CD, que comenzará 2018 con más problemas que con los que terminará 2017. El club azulino ya sabe que vuelve a tener los derechos federativos bloqueados por incumplir el calendario de pagos acordado con la Federación Andaluza por deudas del pasado, correspondientes a entrenadores y a algunos futbolistas.

Así, Vicente Vargas, salvo que el club haga frente a una parte de lo que debe, se va a quedar con una plantilla corta y sin refuerzos de cara a la segunda vuelta de la competición, que arrancará el próximo 7 de enero en Chapín, en principio a las doce de la mañana, ante el Ciudad de Lucena.

El plazo para realizar contrataciones en Tercera División estará abierto hasta finales del próximo mes de enero, por lo que aún queda tiempo por delante para que el XCD levante el embargo. Otra de las opciones que se barajan es la vuelta de futbolistas como Mike o Joshua, que se encuentran entrenando en el Extremadura B desde que Ricardo García se hizo cargo del plantel porque la empresa que los representa prefería tenerles en Almendralejo. De todos modos, tienen ficha con el Deportivo y mientras no causen baja no podrían defender la camiseta de otro equipo.

Ante esta situación, los técnicos tienen asumido que los mejores refuerzos para el segundo tramo liguero serán los futbolistas que han estado lesionados durante bastante tiempo y ya se encuentran a punto de reaparecer, como el guardameta David Zamora, que ha estado parado dos meses y medio, Paco Borrego, que se fracturó un dedo de un pie y, aunque volvió a jugar no estaba al cien por cien o el centrocampista Alberto, con molestias en los abductores.

Al margen del tema de los refuerzos, otro gran inconveniente al que debe hacer frente la entidad xerecista es al de los campos de entrenamientos. En el Sánchez Portella de Torrecera, la plantilla se ha estado ejercitando durante los últimos meses y ha disputado varios partidos pero un problema con Endesa, empresa que suministra la luz a las instalaciones, impide que el equipo vuelva allí. No hay luz artificial y tampoco suministro para el generador del agua caliente. Los futbolistas regresan al trabajo el martes y aún no saben en qué campo podrán ejercitarse durante la semana para preparar el partido frente al Ciudad de Lucena.

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