El Xerez ya prepara el encuentro del sábado, a partir de las once y media de la mañana, ante el Mazagón en el Municipal y Mendoza tiene la enfermería a tope. Hasta cinco futbolistas arrastran diferentes problemas físicos y no tienen garantizada su presencia en tierras onubenses. El lateral derecho Antonio Quirós continúa recuperándose de su rotura de fibras y es baja.

El centrocampista Caro se lesionó ante el Balón y el técnico tuvo que cambiarlo. Arrastra problemas en los aductores y está trabajando al margen del grupo. Nene tiene molestias en el bíceps femoral y tiene difícil recuperarse.

Beni y Beato se lesionaron en el entrenamiento del pasado martes en La Granja. Los dos acabaron la sesión con esguince de tobillo. Por último, el guardameta Miguel arrastra una sobrecarga.

Con Jesús Mendoza expulsado el pasado sábado, le tocará a Toni López, segundo entrenador xerecista, estar en el banquillo. El técnico comenta que "espero que las cosas salgan bien y que podamos volver con los tres puntos. Jesús estará cerca y no habrá problemas, el que manda es él".

Respecto al rival, López advierte que el compromiso "no va a ser nada fácil. No sabemos a qué Mazagón nos vamos a encontrar. Han sumado nueve puntos pero en las últimas jornadas, han perdido en casa ante el Chiclana y han empatado con el Sanluqueño B, Olímpica, Villamartín y el Rota. El partido va a ser parecido al del Cortijillos, es un partido trampa y no podemos cometer los mismos errores. En esta oportunidad, tenemos que volver con los tres puntos para afrontar ya la recta final de la primera vuelta con garantías. Después, sólo nos quedará recibir al Chiclana Industrial, jugar ante la Roteña y el derbi con el Jerez Industrial. La categoría está muy igualada y cada jornada se dan resultados inesperados, hasta los equipos que están arriba están fallando algunos".

El Xerez ha encadenado tres partidos sin perder -dos victorias y un empate- y ha logrado cortar una racha de un mes sin ganar que había colocado al equipo en la parte baja de la tabla. López considera que "todos hemos aprendido la lección, los futbolistas y nosotros. El bloque ahora es más compacto, ha recuperado la confianza y, como dice nuestro capitán Barragán, ha aprendido a competir mejor. Ahora, cuando se puede jugar, se juega y se toca y cuando no lo podemos hacer, porque el rival nos lo pone complicado o porque el terreno de juego no lo permite, no se hace. Hay que ser prácticos y adaptarse en cada momento a cada situación y a cada rival, esta categoría es así".