Emilio Viqueira, director deportivo del Xerez, vivió ayer un día de sensaciones encontradas. Por un lado, pasó el mal trago de acompañar a Juan Merino en su despedida y, por otro, de dar la alternativa a Vicente Moreno como entrenador de la primera plantilla azulina.

El gallego, en primer lugar, dedicó al ya ex entrenador azulino, palabras de agradecimiento: "Se va una gran persona y un buen entrenador. Los que nos hacen buenos o malos son los futbolistas con su juego y nos han faltado resultados. Es la prima medida que se toma y, sinceramente, es un día jodido por el cese de Juan. Él se ha tenido que marchar pero son ellos los que juegan".

Aún así, el director deportivo xerecista reiteró también su "total confianza en la plantilla pero si la cosa sigue así, no será sólo el entrenador el que salga. Los futbolistas tienen que dar un paso adelante y tienen dos exámenes de aquí a Navidad".

En un primer momento, Viqueira apoyó al técnico tras perder ante el Huesca, pero el domingo optó por destituirle. Justificó su cambio de opinión argumentando que "como xerecista pasé vergüenza el sábado y no es justo decirle a Juan vete a Villarreal, si ganas, te quedas y si, no a la calle. Era el momento y muy a mi pesar se tomó la decisión porque era lo mejor para el grupo".

"Espero -añadió- que las decisiones que estamos tomando y las medidas que estamos poniendo en práctica lleguen a buen puerto. Pasé una noche jodida y yo no voy en contra del Xerez, no quiero este ambiente en casa, no quiero tanta mala leche en todo el entorno, ahí está la decisión si es lo que los futbolistas necesitan para sentirse más tranquilos. El que quiera estar en el barco, estará hasta el final y el que no quiera, no lo estará".

Con esas palabras, Viqueira lanzó un mensaje a navegantes y no quiso aclarar si de su comentario podía desprenderse que en el mercado de invierno se podría producir la salida de algún jugador. "Mis palabras son claras. Significan que los que juegan son los futbolista, creo que teníamos una persona competente y preparada para el cargo de entrenador pero estamos en manos de ellos, confío en la plantilla pero tiene que demostrarlo. No me han gustado muchas cosas de las que he visto y mi cargo está tomar decisiones".

También quiso dejar claro que "en ningún momento he puesto mi cargo a disposición del club, aunque hay muchos que quieren que me vaya. Me siento más fuerte que nunca. Cuando haya venta, se verá y cuando llegue el momento, de marcharme, también".

Aparcado el tema de Merino, se centró en reivindicar la valía de Vicente Moreno. "Conoce la casa y a los futbolistas y es la persona idónea para sacar esto adelante. Si gana y todo va bien, es una posibilidad que continúe. Económica el club está mal, pero ante todo creemos en su capacidad y es la persona idónea".

Viqueira se mostró contundente a la hora de desmentir que su cambio de opinión sobre la continuidad de Merino se debiese a una imposición porque el club se haya podido vender: "No he recibido órdenes de nadie, ojalá el club se venda y venga gente competente, con dinero y saque al Xerez hacia adelante".

Por último, defendió la postura de Merino sobre el respaldo que ha tenido por parte del vestuario. "Él lo ha dicho claro, casi toda la plantilla estaba con él, aunque igual hay alguno que piensa que no. En una plantilla siempre hay discrepancias pero creo que la mayoría ha sentido mucho la marcha de Juan".