El Xerez Deportivo FC no perdía dos partidos seguidos desde hace más de un año, cuando en la temporada pasada cayó en el Nuevo Mirador de Algeciras (1-0) y a la jornada siguiente en Chapín con el Córdoba B (0-3), la que era la última derrota en el estadio jerezano hasta la visita del Conil hace un par de jornadas. Y como entonces, el siguiente rival de los azulinos fue el Ciudad de Lucena, próximo adversario en Chapín dentro de dos fines de semana ya que el próximo no hay competición por los compromisos de la selección andaluza de la primera fase de la XII Copa de Regiones UEFA.
En efecto, el Xerez DFC atraviesa una etapa inusual pero no desconocida. El equipo azulino no está, por su potencial, nada acostumbrado a las derrotas y mucho menos a perder dos partidos seguidos, lo que en Tercera División y pese a la competitividad que hay en el grupo solo ha sufrido en una ocasión antes de la mala racha actual.
La pasada temporada, con Masegosa en el banquillo y después de ganar en Ceuta (0-3) y al Guadalcacín el Día del Pilar en viernes (1-0), la racha se torció dos días después en Algeciras (1-0) y por primera vez en la categoría, el Xerez DFC encadenaba dos derrotas seguidas y perdía, ante el filial cordobesista, su primer partido en Chapín (0-3).
A partir de entonces, los xerecistas encadenaron una fenomenal racha de 28 partidos sin conocer la derrota, con 13 victorias y 15 empates -incluyendo el relevo en el banquillo con la llegada de García Tébar- que se truncó a cuatro jornadas del final en la visita al Cádiz B (1-0).
Esta temporada las dos derrotas seguidas han llegado más tarde: en la 2018-19 fueron en las jornadas 9 y 10 (15 y 22 de octubre); ahora han sido en la 15 y 16, provocando una situación tan insólita como anecdótica al llevar solo tres partidos en el banquillo: Josu Uribe ha perdido más partidos (2) que ha ganado (1) al frente del Xerez Deportivo FC.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios