Pedro, lateral izquierdo del Xerez, se llevó el pasado domingo frente al Bazán en La Juventud "uno de los mayores sustos de mi vida. Durante casi una hora no veía por un ojo y pensé que no volvería a recuperar la vista".

El jugador azulino tuvo que abandonar el terreno de juego en el minuto 78 después de un encontronazo fortuito con un futbolista del cuadro isleño. Pedro recuerda que "él entraba en carrera por la banda y yo también iba fuerte para intentar quitarle el balón, chocamos y él giró el brazo con tan mala suerte que me metió un dedo en el ojo con muchísima fuerza. Fue una sensación rara e impactante. Primero, no veía nada y luego, cuando fui recobrando la vista poco a poco, cuando ya estaba en mi casa en El Puerto, comencé a ver doble. Poco a poco, con suero y reposo, comencé a ver con más normalidad. Ahora, todavía me duele el ojo bastante del impacto del dedo. Me asusté bastante porque nunca me había sucedido nada parecido ni mucho menos".

El defensa es uno de los supervivientes de la pasada temporada y asegura que este campaña "está resultando igual de complicada que la pasada, aunque a nivel de resultados estamos mejor y también en el sentido de que no hemos tenido que cambiar tanto ni de campos para jugar los partidos ni para entrenar, aunque los horarios no son buenos y los medios tampoco son demasiados".

Sobre la racha del equipo, explica que "me da mucha rabia. A mí siempre me gusta mirar la clasificación pero hacia varias jornadas que no quería ni mirarla. Cuando la vi ayer no paré de darle vueltas a la cabeza en un rato. Tenemos treinta y cuatro puntos y con un poquito más de suerte podíamos tener al menos cuarenta y estar luchando con los de arriba. El Industrial, por ejemplo, atravesó un mal momento pero ha pegado un arreón y está ahí. Nosotros no estamos teniendo nada de suerte, ni de cara al gol ni con los arbitrajes. Yo no quiero que me den nada pero tampoco que me quiten y el del domingo no estuvo nada acertado. La expulsión de Caro fue rigurosa y si a él le enseña amarilla por tocar el balón con la mano, a Adri, del Bazán, también se la tiene que enseñar en una jugada mucho más clara que la de Caro".

El lateral es de los que piensan que no van a pasar apuros para salvar la categoría y él apuesta por terminar la Liga "con buenas sensaciones. Necesitamos ganar un partido para recuperar la confianza que teníamos antes. Creo que nuestro problema es más psicológico que de fútbol. En estos momentos, es cuando más tranquilos tenemos que estar y es cuando la gente se pone más nerviosa".

Pedro, además, estima que "esta categoría es muy igualada, cualquier equipo te compite y no podemos bajar la guardia, aquí como no corras igual o más que el rival no tienes nada que hacer".

El sábado se enfrentan al Algaida en El Picacho y en Sanlúcar espera "romper esta racha de una vez por todas, aunque es un poco lo que he comentado antes, todos los equipos son complicados y mucho más en casa. Han mejorado bastante, están en una zona cómoda y estarán con la moral por las nubes después de haber sorprendido al Rota en su propio campo. Para ganar, tenemos que salir a muerte desde el primer minuto".