La bata de cola está de actualidad. Con la llegada de las próximas ferias, la Fundación Carlos de Amberes de Madrid inaugurará la exposición 'Homenaje a la bata de cola' del 20 al 24 de abril. Esta cita está enmarcada dentro del proyecto Andalucía, Destino de Moda de Go! Eventos y Comunicación, en colaboración con la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía.

La exposición, que tiene como objetivo homenajear esta prenda de flamenco como icono de moda atemporal, estará abierta al público totalmente gratuita. "La bata de cola es un buque insignia de la indumentaria tradicional andaluza, un icono atemporal que se mueve a paso seguro entre la tradición y la transgresión”, señala Ángela María Martín López, comisaria de la exposición. En esta misma línea añade que "la bata de cola ha traspasado las fronteras del flamenco en los antiguos cafés, transformándose en el elemento protagonista de la canción española en teatros y auditorios”, añade Martín.

Las primeras apariciones de la bata de cola se remontan al siglo XIX, cuando la indumentaria de fiesta de las mujeres de aquella época se basaba en un vestido que incluía un recogido a un lado. El recogido permitía a las señoras andar por la calle sin arrastrar el vestido y, cuando llegaban a un sitio de interior, en el que el suelo permanecía limpio, se soltaban el vestido y comenzaban a bailar.

En sus inicios, las batas de cola pesaban cerca de los 25 kilos, mientras que ahora el peso medio de estas prendas ronda los cinco kilos. Una bata de cola precisa, en términos generales, entre 35 metros y 50 metros de tela.

A principios del siglo pasado, las bailaoras Pastora Imperio y Antonia Mercé fueron las primeras en introducir esta indumentaria como algo habitual en sus espectáculos de baile. A día de hoy, la bata de cola está reconocida como emblema del flamenco.

La fundación Carlos de Amberes es la más antigua de España que permanece en activo. Desde su fundación en 1594, la entidad levantó el interés de ciudades como Bélgica, Holanda o Luxemburgo y, en concordancia con sus orígenes, se propuso contribuir al acercamiento cultural entre España y los territorios de las antiguas Diecisiete Provincias de Flandes, tanto dentro del marco europeo como en el de otras áreas geográficas y políticas.