Ciudadanos, por el momento, no adoptará decisión alguna sobre el futuro político de Mario Rosado hasta que el caso no se adopten decisiones judiciales. Eso sí, cuando transcendieron los hechos en la tarde del miércoles el partido cerró filas en torno a su edil; ayer, en cambio, se limitó a señalar que, en el caso de que los hechos se confirmaran en sede judicial, se adoptarían medidas disciplinarias.

En un escueto comunicado, la formación naranja apuntó: "Ciudadanos está a la espera de que la justicia esclarezca lo ocurrido y, si ha habido agresión, será expulsado inmediatamente del partido". "En Ciudadanos no hay cabida para personas con este tipo de conductas", agregó.

En esta misma línea, el portavoz de este partido en el País Vasco y candidato a lehendakari, Nicolás de Miguel, apuntó: "Parece ser que los hechos no están del todo esclarecidos; no sabemos exactamente lo que ha pasado pero obraremos en consecuencia". "En caso de que hipotéticamente fuese cierto, automáticamente, en el momento en el que fuese procesado ese señor sería expulsado del partido", dijo. No obstante, apeló a la "presunción de inocencia" e indicó que se debe evitar "entrar en hipótesis" sobre lo ocurrido hasta no haber un pronunciamiento judicial.

Mario Rosado es uno de los dos concejales que tiene la formación en el Ayuntamiento desde las elecciones municipales de 2015 y también es consejero de algunas empresas municipales. Es abogado de profesión y forma parte del turno de oficio para casos de violencia de género. El gobierno local, mientras tanto, declinó pronunciarse a la espera de avances en la investigación judicial.