El Centro de Día del Hogar La Salle abre sus puertas también en verano para ampliar su oferta de talleres a jóvenes y adolescentes en situación de riesgo o conflicto social y con edades comprendidas entre los 12 y 19 años. Nueve talleres componen el programa de voluntariado abierto que con el eslogan 'ven a vivir un verano solidario' ofertan en el centro. Hasta el momento, esta iniciativa está teniendo muy buena aceptación y ya cuentan con 60 voluntarios aunque según afirma Javier García, vocal de Voluntariado, con esto sólo han cubierto julio, para agosto están teniendo una gran carencia, sobre todo, a nivel de profesorado.

Los talleres que los voluntarios realizan con los 40 adolescentes que actualmente están inscritos se imparten de lunes a viernes en horario de 10 a 13 horas y las temáticas son de diversa índole yendo éstas desde el uso correcto de la informática a la dinamización deportiva e incluso fomentando la cultura musical con un taller de cajón flamenco en el que los jóvenes son los que se fabrican su caja. Éste es el taller que mayor asistencia registra con 28 adolescentes inscritos que se encuentran en la fase de diseño del cajón.

Cobra especial importancia el taller de apoyo escolar que se encuentra dividido en dos grupos. A uno asisten adolescentes de Jerez y la comarca que reciben refuerzo escolar y motivación al estudio de manera individualizada. Y un segundo grupo compuesto por inmigrantes ex tutelados por la Junta que reciben clases de español escrito y hablado. "Cuando los adolescentes llegan al centro pasan una entrevista, valoro la necesidad de asistencia a los talleres y seguidamente se integran en éstos", asegura Inma García, psicóloga del Hogar La Salle.

Respecto a la campaña de voluntariado para este verano, Michel Bustillo, presidente de Hogar La Salle, recalca que se trata de una apuesta arriesgada en una época donde lo que a todos apetece es descanso, playa y diversión y lanza una pregunta al aire: "A pesar de todo eso, que es necesario, ¿se puede hacer algo más?" Un ejemplo de ello es la llegada prevista para la semana que viene de Nuria Sanz, una voluntaria de La Salle del País Vasco que viene a Jerez para vivir dos semanas en el Hogar La Salle aportando todo lo que sabe. El presidente califica esta acción como "un ejemplo de solidaridad del que se siente muy orgulloso". Además, en tiempos de paro como los que nos encontramos, desde el Centro de Día, en colaboración con la Escuela de Hostelería, han conseguido insertar laboralmente a dos jóvenes inmigrantes gracias al curso de camarero al que actualmente acuden seis de los adolescentes.

Como explicación a la mayoría inmigrante que acude a estos talleres, Bustillo afirma que hay dos motivos, "uno es que la crisis a los primeros que afecta es a los más vulnerables y otro es que existe una gran carencia de recursos para trabajar con jóvenes inmigrantes ex tutelados". Hogar La Salle está cubriendo unas necesidades que otros organismos no pueden.

A día de hoy, Hogar La Salle se encuentra en conversaciones con la Consejería de Igualdad Social y con la Dirección General de Infancia y Familia, para conveniar un hogar para adolescentes en conflicto social del que harán una apuesta firme en septiembre. A su vez, existe otro proyecto pendiente de respuesta que consiste en crear una escuela taller de jardinería y conservación de edificios.

Actualmente, casi el cien por cien de la financiación corre por cuenta de los hermanos del colegio La Salle, que apostaron firmemente por este proyecto cuando hace un año y medio abrieron las puertas de este centro en las que este verano colgará el cartel de 'abierto por vacaciones'.