¿Se tocó fondo el año pasado? ¿Realmente hay atisbo de recuperación económica o todo es un espejismo pasajero? La única certeza, revelan los datos, es que Jerez tardará algo más en salir del profundo atolladero de la recesión económica generalizada. Si antes del virulento estallido de la crisis global, hace unos tres años, se situaba como pujante cuarta ciudad andaluza -por delante de cinco capitales- en dinamismo económico, las embestidas de la destrucción de empleo y, especialmente, el desplome del motor que engrasaba aquella economía, el 'ladrillo' y sus derivados, la han colocado en una dramática y alarmante realidad. Realidad, eso sí, de la que tampoco escapan en mayor o menor medida el conjunto de grandes ciudades andaluzas. La tasa de paro se disparó en el último año y el peso económico de la capital del Marco volvió a caer por cuarto ejercicio consecutivo. Estos nefastos indicadores relativos al municipio, incluidos en el Anuario Económico de España 2010 que edita La Caixa, se convierten en fiel reflejo de la compleja coyuntura que padece la tercera 'gran ciudad' de todo el país con mayor porcentaje de desempleo sobre el total de su población (207.532 habitantes).

La tasa de paro en Jerez, según las estadísticas referidas al año pasado que publica el informe de la caja catalana, asciende al 12,6% sobre el total de población, 2,9 puntos por encima de la registrada en 2008, algo por encima de la media provincial y andaluza, y sólo superada por Elche (13,5%) y Las Palmas de Gran Canaria, con un 13% de desempleo. Entre las capitales y poblaciones con más de 50.000 habitantes del territorio nacional, Jerez ostenta el triste honor de figurar como noveno municipio en tasa de paro. Y lo que es peor, con un claro retroceso en su actividad económica y tejido productivo, al tiempo que se siguen tocando todos los palos posibles hasta acertar con un nuevo modelo de desarrollo: de la aeronáutica al comercio y de lo agroindustrial al turismo.

El índice de actividad económica de la ciudad, una especie de termómetro que mide su salud y pujanza productiva, es actualmente de 381 puntos, cuando hace sólo cinco años se situaba en 670, lo que representa una caída del 43,1%. Desde ese momento, esta variable no ha dejado de descender, lo cual no impidió, por ejemplo, que en 2007 Jerez se aupara a la cuarta plaza en el podio de liderazgo económico de las grandes ciudades de la comunidad autónoma.

En cambio, los reveses de la economía y el debilitamiento de la ya de por sí endeble estructura productiva jerezana la han devuelto a niveles de actividad económica de hace ocho años, pues en 2002 el mencionado índice económico del estudio de La Caixa se situaba en 393. Además, este acusado descenso en el peso regional de la economía jerezana ha provocado que municipios de características similares a las de la ciudad, como Marbella (índice de 393), la hayan adelantado en la quinta posición del top de las citadas ciudades andaluzas con mayor dinamismo económico. Ranking, por cierto, que lidera Málaga con un índice de 1.714, seguida de la capital andaluza, Sevilla, con un índice de actividad económica que el referido estudio cifra en 1.620.

Aun así, siempre según los datos del Anuario 2010, Jerez sigue siendo la ciudad que más aporta a la producción económica y empresarial de la provincia -la segunda es Cádiz con un índice de 274- y se mantiene por delante de cuatro capitales andaluzas en lo que a peso económico se refiere. El servicio de estudios de la caja catalana obtiene este índice económico en función del impuesto correspondiente al total de actividades económicas empresariales (industriales, comerciales y de servicios) y profesionales que trabajan en la ciudad y establece una base de 100.000 correspondiente al total del país.

Pese al aplastante contexto económico, uno de los elementos que justifican, sólo en parte, el crecimiento del paro y el deterioro de las perspectivas económicas en la ciudad ha sido que Jerez se encuentre entre las ciudades con mayor variación poblacional entre 2004 y 2009. Según recoge el informe económico de la entidad catalana, este aumento poblacional en 14.884 personas significa, en época de crisis, mayor número de demandantes de empleo y, por tanto, mayor número de parados si el mercado laboral es incapaz de absorber esta mano de obra. Sólo Málaga y Marbella, dentro de las grandes ciudades andaluzas, han superado a Jerez en variación poblacional en el último lustro, con aumentos de 20.574 y 17.270 habitantes, respectivamente. Ciudades como Sevilla, Granada o Cádiz perdieron habitantes en este periodo de tiempo.

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