Feria de Jerez

Los representantes de Zaragoza creen que la Feria no ocupa el lugar que le corresponde

  • La alcaldesa asegura que "la huelga de los autobuses se ha convertido en un clásico de esta celebración"

Pasaban diez minutos de las diez de la noche cuando se hizo la luz sobre el González Hontoria. Ante el pulsador, que fue accionado por el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Zaragoza, Carlos Pérez, se aglutinaron buena parte de los concejales socialistas jerezanos acompañando a la alcaldesa, casos de Francisco Lebrero, Casto Sánchez, Juan Pedro Crisol, Míriam Alconchel, África Becerra, Antonio Fernández Ortega, Carmen Martínez, Juan Salguero, Dolores Barroso y Ainhoa Gil, que ni corta ni perezosa se plantó en el Real con su precioso bebé. Junto a ellos, además, estuvo el director general de Bienestar Social, José Manuel Jiménez.

Apenas cuarenta minutos antes, un nutrido grupo de cincuenta conductores de los autobuses urbanos paseaban, retadores, sus camisas rosas y chalecos azul marino por el Real. Finalmente no hicieron nada, aunque llegó a temerse el boicoteo de la inauguración del alumbrado, como si ya fuera poco "dejar sin autobús a jóvenes y ancianos. Esta huelga ya es un clásico de la Feria de Jerez, aunque asegura que nadie la va a estropear. Nadie. Cuando la organizamos ya contamos con esto de antemano", recordó minutos más tarde la primera edil. En representación de la principal patrocinadora de la fiesta estuvo Juan Luis Vega, el omnipresente director de Comunicación de González Byass, así como el secretario provincial de Uaga, Salvador Pineda, que ratificó el deseo de los agricultores a los que representa de no criar pimiento ni tomate alguno el año que viene. ¡Una Feria sin pimientos! ¿Se la imaginan?

El primer detalle de la Feria lo tuvo Jesús Rubiales, gerente de la conocida compañía Venenciadores SL, que regaló al primer teniente de alcalde zaragozano un bonito estuche de madera con seis catavinos.

Atrás quedó un castillo de fuegos de artificio al que le faltó la suficiente continuidad. Tanto es así que hasta el público, en dos ocasiones, comenzó a aplaudir al creer que el lanzamiento de pirotecnia había concluido. Cuando llegó la hora, en honor a la verdad, las miles de personas allí concentradas aplaudieron a rabiar no sin antes aguantar unos segundos a la espera de que ningún 'pim, pam pum' tronara por el despejado cielo del parque.

Pilar Sánchez aprovechó los minutos posteriores al alumbrado para desearle a sus paisanos una "feliz Feria". No se cortó la primera edil a la hora de calificar la Feria del Caballo como "la mejor del mundo" y remachó sus declaraciones recordando la que es, sin duda, una de las grandes virtudes de esta fiesta: "Su ambiente abierto", tanto en lo personal como en el acceso a las casetas.

La alcaldesa dio, además, una noticia que se veía venir. Jerez dispondrá de un día en su honor nada menos que en la Exposición Universal de la capital aragonesa. Se trata, en concreto y según expuso con posterioridad el primer teniente de alcalde Zaragoza, de un convenio alcanzado entre el Gobierno aragonés y la Junta de Andalucía. "Lo que es seguro -dijo Sánchez- es que vamos a estrechar allí los lazos que hemos cerrado aquí".

A los zaragozanos se les quedó, ciertamente, cara de asombro cuando vieron la forma en la que la noche se tornaba día de colores merced al efecto mágico de un pulsador rojo. Carlos Pérez, uno de los hombres de confianza del alcalde y ex ministro Juan Alberto  Belloch, destacó lo impresionado que le había dejado semejante despliegue de luz y color, "a pesar de que he tenido el privilegio de conocer otras grandes fiestas" y mostró su satisfacción "por el hecho de que Jerez tenga una alcaldesa que lleve por nombre Pilar", en obvia referencia a la patrona española y aragonesa. También excusó la ausencia de su alcalde y compañero "que ha tenido que emprender un importante viaje relacionado con la organización de la Expo 2008".

Por su parte, el presidente de la Diputación de Zaragoza, Javier Lambán, manifestó que si algo caracteriza a las fiestas españolas es que en todas ellas hay un llamamiento que anuncia su celebración "aunque no recuerdo ciertamente algo tan espectacular como este alumbrado". Los dos aragoneses, con indudable pesar, señalaban ayer que será a primera hora de la mañana cuando retornen a su ciudad natal. La organización de una Expo, imagínenselo, no perdona segundo alguno de trabajo. Tuvo Lambán una frase realmente lapidaria, una vez que vio la Feria de Jerez en plena marcha. "No me explico cómo es posible que haya ferias en Andalucía con más fama que la de Jerez. Esta feria es sencillamente preciosa y que no ocupe el lugar que le corresponde me parece tremendamente injusto". Impresionado que se quedó el hombre.

Cada cual -ya se sabe lo que quiere decir el dicho- cuenta la Feria como le va. Y por lo que sabemos Francisco Lebrero se dedica a abrir líneas de negocio, de contacto, de relación en suma con toda ciudad que se le pone por delante. Tras Zaragoza, sus planes de acercamiento e intercambio se dirigen a importantes ciudades y zonas como son los casos de Canarias, Barcelona e incluso Bilbao. "Este trabajo        -señaló a este medio- consiste en ir levantando la tierra y arrojar semillas que en su momento darán el fruto apetecido".

El alumbrado vino a poner el punto final a una intensa jornada de inauguraciones en el Real de la Feria. No en vano, quien más, quien menos, se buscó el hueco para quedar con los amigos o socios en la caseta y darse el gustazo de inaugurarla con cierta tranquilidad. Fue el caso por ejemplo de la caseta de la Real Hermandad del Rocío y de la Caseta de los Mayores, uno de los entoldados con mejores precios de todo el parque González Hontoria.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios