Garbiñe Muguruza aseguró que se va satisfecha de Australia pese a la derrota ante la estadounidense Serena Williams. "Perdí con la que podía perder. El año pasado salí con la sensación de que podría haber dado más. Esta vez no, di todo lo que tenía", dijo la española después de caer por 2-6, 6-3 y 6-2 en los octavos ante la número uno del mundo.

La jugadora de 21 años celebró la creciente presencia de compañeras de generación en rondas avanzadas de los grandes torneos. "Ves los rankings y las chicas de los 90 están apareciendo. Es tiempo para un cambio. Se ha visto que tenía mi oportunidad", añadió Muguruza, que venció a Williams el año pasado en Roland Garros y estuvo ayer a un punto de adelantarse por dos juegos a cero en el tercer set.

"Fue un gran partido y felicito a Garbiñe por lo bien que jugó. En ese primer set hizo todo lo que se puede hacer bien", aseguró la menor de las Williams, que busca en Australia su decimonoveno título de Grand Slam para acercarse al récord de 22 de la alemana Steffi Graf.

El momento clave del encuentro llegó en la tercera manga. Con ventaja de 1-0 tras quebrar el saque de Serena, Muguruza se quedó frenada tras un gran tiro y se precipitó luego al volear. Intentó tocar la pelota, falló y terminó cediendo su servicio. En el 1-1, la española volvió a tener oportunidades, con seis pelotas de break sobre el saque de la yanqui. No las aprovechó, y de un potencial 3-0 en el set definitivo pasó a un 1-2. Ya con la moral de Muguruza minada y Serena imparable, el partido corrió veloz a las manos de la estadounidense.

Venus, hermana de Serena, rejuveneció a los 34 años al ganar a la polaca Agnieszka Radwanska por 6-3, 2-6 y 6-1. Se medirá a su compatriota Madison Keys.