El traspaso de la gestión del agua y el Plan Urban -la iniciativa cofinanciada por la Unión Europea para actuaciones en la zona Sur de la ciudad -han sido el salvavidas del gobierno local para poder ejecutar obras en lo que va de año. De hecho, ocho de cada 10 euros que ha destinado para este tipo de actuaciones se han financiado gracias a estos fondos, de carácter extraordinario, que han permitido de algún modo maquillar las consecuencias que provoca no solo estar sin presupuesto aprobado a estas alturas del año sino también que esté fuertemente condicionado por el incremento de los gastos financieros municipales y unos ingresos que no terminan de remontar. A día de hoy, el Ayuntamiento tiene un escaso margen para acometer inversiones de mejora en la ciudad que ha podido solventar por estas vías.

Según los datos publicados en la plataforma de contratación municipal, en lo que va de año el Ayuntamiento ha sacado a licitación unos 3,3 millones de euros en obras. Sin embargo, el grueso se lo lleva las que se están financiando por el dinero sufragado por la empresa Aqualia para hacerse con la gestión del ciclo integral del agua durante los próximos 25 años. A día de hoy, el gobierno local ya ha comprometido, y ejecutado en parte, obras por valor de 2,7 millones de euros, todas ellas incluidas en el llamado plan de actuación 2014-2015, que se convertirá en una de las principales bazas que presentará el gobierno local para defender su gestión. Mientras, unos 486.000 euros ha destinado para obras incluidas en el Plan Urban.

El Ayuntamiento ya ha percibido los 80,5 millones de euros que Aqualia se comprometió a abonar por la gestión integral del agua. Así, 60 han ido destinados a hacer frente deuda con los bancos y 20 millones a actuaciones de mejora en la ciudad. De estos últimos, unos 2,7 millones se han gastado ya en el plan de actuación con intervenciones tales como la reparación de las cornisas de la Ermita de Guía, la restauración de la fuente de la Alcubilla o de la fachada de la Torre del Agua de La Plata. Mientras tanto, están en proceso de adjudicación la consolidación del Palacio Riquelme, la mejora de los equipamientos en Parque Atlántico y del campo de fútbol de Picadueñas así como la urbanización del parque de La Marquesa. En sucesivos meses, el Ayuntamiento tiene previsto seguir acometiendo más obras con cargo a estas transferencias.

Pero en este grupo ya hay comprometidos otros 1,7 millones de convenios tales como el suscrito con el Obispado para la rehabilitación de las Iglesias de Santiago, San Mateo y San Juan de los Caballeros (el importe ronda los 620.000 euros) o con el Consorcio de la Zona Franca para la reurbanización del polígono industrial de El Portal, una inversión que rondará los cuatro millones de euros y que el Ayuntamiento aportará unos 1,1 millones aproximadamente.

Sobre el Plan Urban, en lo que va de año la actuación más importante es la demolición del viejo mercado municipal de Federico Mayo, cuyo presupuesto ronda los 326.000 euros aproximadamente. No obstante, estas contrataciones realizadas para esta iniciativa enmarcada en la zona sur de la ciudad se están complementando con otras de servicios y suministros -como la elaboración de planes para el desarrollo del comercio o actividades de apoyos a menores- que han tenido un coste de unos 180.000 euros aproximadamente.

En cuantoal resto de obras no incluidas en ninguno de estos planes y acometidas en este año, las de mayor presupuesto fueron la culminación de la urbanización del Pago Percebá, cuyo presupuesto rondó los 196.000 euros, así como la adaptación del centro de recepción en el Palacio de Villavicencio del Alcázar, cuyo coste se situó en los 132.000 euros. Mientras tanto, el Consistorio pudo acometer algunas intervenciones para el inicio de la Vuelta Ciclista, como la instalación del escenario y de las venencias de la plaza del Mamelón así como la adecuación del parque González Hontoria gracias a partidas genéricas destinadas a la conservación de vías públicas que recoge el presupuesto prorrogado.