Los mayoristas de pescado de El Puerto asociados en Asoven no se establecerán finalmente en las instalaciones de Mercajerez después de que la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz les ofertara una rebaja en las aportaciones que cada empresario debe aportar por realizar su trabajo en la dársena pesquera de la localidad vecina. Las quejas de los mayoristas por lo elevado de dichas cuotas provocó el distanciamiento respecto a la Autoridad Portuaria, así como que expresaran su idea de abandonar el puerto y establecerse en las instalaciones del popular 'Merca', donde Mercasa invertiría dos millones de euros para levantar una 'lonja'.

La última votación realizada entre los socios dio un resultado favorable al traslado a Jerez. De los veinte mayoristas, una mayoría de los mismos votó por el traslado a Jerez (11), si bien buena parte de Asoven (9) apostó por la continuidad en las instalaciones ubicadas en la desembocadura del río Guadalete en El Puerto. La empresa pública Mercasa ha considerado que los apoyos, aunque mayoritarios, no son suficientes como para acometer una inversión de dos millones de euros en Mercajerez de cara a dar acogida a este sector de negocio. Habría sido necesario un apoyo mucho más unánime y rotundo para que esta inversión hubiera contado con el permiso de las altas instancias de la compañía rectora de los mercados mayoristas españoles.

Los mayoristas de pescado de El Puerto tenían ante sí una oferta económica mucho más rentable por parte de Mercajerez, si bien la referida rebaja realizada por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz así como las presumibles presiones de índole política recibidas han frenado el traslado.

Un hecho especialmente destacable es que en el seno de Mercasa se considera que el asunto, pese a no poder cerrarse en estos momentos, sigue estando caliente. "Hemos sembrado una semilla de futuro que puede dar sus frutos en apenas unos pocos años", aseguraron a este medio fuentes bien informadas que destacaron el hecho de que la mayoría, pero no todos los mayoristas, apostaban por trasladarse a Jerez. Ese "no todos" ha sido finalmente lo que ha provocado que Mercasa haya desistido de momento de acometer una inversión millonaria que podría haber corrido el riesgo de quedarse sin uso, lo que hubiera supuesto un serio revés, tanto a nivel económico como de gestión.

La primera rebaja realizada por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz a los mayoristas de pescado de El Puerto se cifró en un 0,3% de la tasa de actividad, una cifra que se consideró muy limitada en su momento. Dicha oferta ha sido mejorada (este medio desconoce exactamente la cuantía de la misma) en la cual se tenían en cuenta las ventas realizadas por cada asentador.

El tiempo que dure dicha rebaja (hay fuentes que aseguran que apenas estará vigente entre dos y tres años) podría motivar que en unos meses se vuelva a producir un acercamiento y que éste, esta vez sí, concluya con un apoyo más unánime a un Mercajerez que al fin podría contar con un mercado de pescados en segunda venta, algo que se persigue desde hace largo tiempo.

Según los mayoristas, la fiscalidad que deben abonar a la Autoridad Portuaria es muy alta, la cual en 2013 supuso "un desembolso cercano a los 1,2 millones de euros", cantidad que se considera inasumible. Otro motivo de queja es la incertidumbre que rodea a las actuaciones de la Autoridad Portuaria. No en vano, las autorizaciones que adjudica se renuevan cada tres años y, según denunció el sector a este periódico, este hecho genera inquietud entre los empresarios a la hora de decidir si continúan o no con sus negocios, "dado que dependen de las condiciones que imponga Autoridad Portuaria". Un hecho innegable es que hace apenas cuatro años el número de mayoristas de Asoven rozaba las tres decenas. Ahora sólo hay dos.