Banderas de España colocadas en fachadas y toldos de la ciudad son el primer reclamo de los hosteleros de Jerez para llamar la atención de los miles de motoristas que durante todo el puente de mayo disfrutaran del Gran Premio de España de Motociclismo. Por el momento, los hoteles de Jerez y de buena parte de la provincia están casi completos, y desde Madrid no hay trenes y ni aviones con destino a la ciudad. Además, según la Agencia Estatal de Meteorología, las temperaturas mínimas rondarán el fin de semana los 14-15 grados, mientras que las máximas podrían llegar a los 29 grados el viernes, 31 grados el sábado y 28, el domingo.

Con estas previsiones no es de extrañar que los hoteleros de la provincia esperen con ganas la llegada de los moteros. Francisco Braza, propietario de El Mesón de Paco y secretario y vocal de la asociación de comerciantes Asunico, reconoce que el buen tiempo es una de las cosas que más beneficia al evento. "Este año el tiempo ha respetado la Semana Santa, parece que también las motos y confiemos en que en Feria pase lo mismo", explica este hostelero del centro de la ciudad. En su caso, como, en el de otros muchos profesionales del sector, la preparación para recibir a los aficionados consiste en reforzar la plantilla habitual de empleados y en aumentar las provisiones. "He comprado tres veces más de lo que habitualmente adquiero y he contratado dos chavales, a tiempo completo, para los dos días", explica Braza. Respecto a los precios de estos días, este hostelero reconoce que hay establecimientos que optan por subir las tarifas habituales, pero "yo, por ejemplo, no lo hago, mantengo los mismos precios durante todo el año". Además, señala que esto sirve para fidelizar clientes de un año para otro.

Desde la sección de Hostelería de Acoje también explican que las previsiones son buenas, por el momento, pero "son eso, previsiones, después tendremos que ver si se cumplen". Igualmente, reconocen que dependiendo de la zona de Jerez se notará más o menos la presencia de los moteros. Así, como es habitual, las avenidas Álvaro Domecq, Arcos, Europa y el centro son, junto a los alrededores del circuito, las áreas más beneficiadas por la presencia de aficionados al motor. Desde Acoje afirman que al tratarse también de un puente es normal reforzar las plantillas o comprar más bebidas y alimentos. "Confiamos en mejorar los datos del año anterior", auguran desde la asociación de comerciantes. En este sentido, recuerdan que el cierre de la ciudad a los moteros que se hizo años atrás perjudicó mucho al evento y "poquito a poco estamos recuperando la normalidad. Es algo que afectó mucho a nivel de imagen". La presencia de moteros en la ciudad provocará también que los establecimientos, especialmente los de copas, tengan promociones especiales para recibir a los aficionados. Además, habrá conciertos en distintos puntos para atraer a un mayor número de público.

Con motivo de la celebración del Mundial, hay que recordar que hoy viernes comenzarán los cambios de tráfico, desde las 16 horas y hasta las cuatro de la madrugada del domingo, especialmente en el centro de la ciudad y en las principales avenidas. Habrá aparcamientos para motocicletas en calle Armas, Larga, Porvera y los habituales de la avenida alcalde Álvaro Domecq y avenida Lola Flores. Desde Movilidad se prestará atención especial a zonas como la avenida Álvaro Domecq, donde en cada intersección con las principales calles adyacentes se dispondrá de un servicio de la Policía Local. En Lola Flores se reservará para estacionamiento exclusivo de motocicletas los laterales de la avenida del acerado de los edificios de locales comerciales y de hostelería. Si la situación lo requiere, se impedirá la circulación de motocicletas y ciclomotores en las calles que circundan los parques públicos Iguazú y Niágara. La zona dispondrá de servicio de Policía Local en las intersecciones próximas a los locales comerciales.

En cuanto a la avenida de Arcos, se dispondrá de agentes para regular el tráfico y evitar conatos de carreras ilegales o gymkanas. De igual manera, se situarán agentes motorizados en cada una de las glorietas para controlar el tráfico fluido y seguro de la circulación. Se trata de puntos considerados como "de riesgo de accidentes" en caso de masificación. En la avenida de Europa los policías controlarán que la circulación fluya, evitando carreras ilegales o gymkanas.