La construcción del carril bici está siento casi tan irritante para los jerezanos como fueron reuniones mantenidas entre la Junta de Andalucía y el gobierno local de García-Pelayo para sacar el proyecto adelante. Las constantes vaivenes entre las dos administraciones terminaron llegando a buen puerto (o mejor dicho, a un puerto común), el 13 de junio del año pasado, cuando se firmó el Plan Andaluz de la Bicicleta para Jerez.

La preocupación de estas reuniones fue la de intentar equilibrar la importancia de una red de viales para bicicleta con la convivencia entre peatones y vehículos a motor, además de asentar el presupuesto y las competencias que asumían. Por este motivo, la Junta tuvo que ceder en la petición del Ayuntamiento de Jerez de respetar lo máximo posible la constitución del casco histórico y que las plazas de aparcamiento reguladas por la ORA se vieran afectadas lo menos posible. Ninguno de los dos organismos cayó en la cuenta de lo que verdaderamente causaría el verdadero problema de estos viales:  los árboles.

La Federación Solidaridad recuerda vívidamente estas reuniones entre las dos administraciones. José Saborido, de la asociación de vecinos de La Granja, recuerda que el mes de junio de 2014 "las administraciones estaban tan desesperadas por tener el acuerdo listo en un plazo concreto que no cayeron en la cuenta de que podría haber un problema de este calado". El representante vecinal cuenta que, tras el tiempo perdido entre los diversos encuentros, "el plazo para presentar el presupuesto de esta iniciativa se le acababa a la Junta, así que se terminó aprobando el Plan Andaluz de la Bicicleta a la carrera".

El choque de realidad llegó pronto y en forma de denuncia a través de Ecologistas en Acción. El colectivo fue el encargado de dar la voz de alerta tras la tala de una treintena de jacarandas en la zona de la avenida de Puertas del Sur y bautizaron este tratamiento como un arboricidio. Con la llegada de la construcción de los carriles bici a León de Carranza, la asociación volvía a alertar del problema, por lo que el teniente de alcaldesa de Sostenibilidad, Participación y Movilidad, José Antonio Díaz, envió un mensaje de tranquilidad "a los vecinos y colectivos de la ciudad con respecto a la retirada de árboles del trazado que recorre el carril bici de la ciudad". Así, el delegado de Medio Ambiente trasladó hace dos semanas que "el proyecto contempla el traslado y plantación de los árboles existentes en el recorrido, así como la colocación de nuevas especies, así como la colocación de riego automático en todo el trazado".

Las palabras tranquilizadoras de José Antonio Díaz sirvieron de poco el pasado jueves, cuando jóvenes vecinos de la avenida León de Carranza se encaramaron a un fresno de esta vía para evitar la transplantación de los ejemplares después de que los técnicos ya hubieran llevado a cabo la poda de algunos ejemplares de la zona. Algunos de los jóvenes que se personaron para impedir "la muerte asegurada de estos ejemplares" pertenecen al blog jerezdelosarboles, en el que varios compañeros denuncian a diario la tala indiscriminada de árboles en la ciudad a través de imágenes y de relatos. Precisamente, la avenida José León de Carranza es uno de los sitios más conflictivos debido a que el paso del carril bici implica la reforma total de esta vía.

Otro ejemplo de que la convivencia entre peatones, árboles y bicicletas no ha llegado a buen puerto está en la avenida de la Universidad. En la acera situada junto a la que será la nueva comisaría de Policía se ha situado el ramal junto a la arboleda, dejando para los viandantes un espacio que no llega ni al medio metro -como relata la foto superior-. En este caso, la red social Facebook ha sido la encargada de difundir la voz de vecinos que se quejaban de que por ese espacio es imposible transitar con carritos de bebé o una silla de ruedas.

A pesar de lo que pudiera parecer, no solo los peatones están encontrando problemas en la nueva disposición de la ciudad. El colectivo 'Jerez en bici', a través de su representante Alejandro Renedo, asegura que "aunque vamos a esperar que las obras estén terminadas para dar nuestro juicio sobre el proyecto", encuentran en varios puntos de los viales "una falta de seguridad tremenda. Hay tramos, como los cercanos a la Ronda Este, donde ni vehículos a motor ni bicicletas tenemos visibilidad suficiente para poder circular", expresó Renedo, quien pone como posible solución "que se pongan más semáforos en grandes avenidas para regular el tráfico debidamente". El colectivo se posicionó además en contra de la tala de árboles al ir "en contra de nuestra filosofía de movilidad sostenible y en relación con el medio ambiente".

La asociación 'Jerez en bici' aprovecha además para denunciar las llamadas 'ciclocalles'. Renedo señala que "a pesar de la negativa de que los carriles bici entraran en la calle Larga, en un principio se iban a construir en la calle Muro, pero también se terminó cancelando en pro de una 'ciclocalle". ¿Qué son las 'ciclocalles'? Alejandro Renedo explica que son "vías en las que conviven en la calzada vehículos a motor y las bicicletas, teniendo estas últimas preferencia sobre coches y motos y con la velocidad limitada a 30". Un ejemplo de este tipo de calles serían, por ejemplo, Mercé y Cristal junto al barrio de Santiago. Los ciclistas encuentran varios problemas a este planteamiento, tales como los resaltos y los adoquines, "parece que no se dan cuenta que para una persona que va en bicicleta es primordial el equilibrio y la seguridad, ¿cómo quiere que una persona de 60 años se enfrente a una calzada de adoquines y badenes?".

El malestar vecinal también tiene un gran peso en sitios donde se está acometiendo ahora mismo la construcción del carril bici y que debido al corte de algunos carriles se colapsa el tráfico a diario en hora punto. Dos buenos ejemplos son la rotonda del Minotauro, eje central del tráfico en la ciudad, y la avenida de la Universidad en su paso entre TorresBlancas y Olivar de Rivero. También se han dado contratiempos puntuales en la conexión entre las avenidas José León de Carranza y la del Ejército, donde la rotura de una tubería convirtió una buena parte de la zona en una auténtica piscina.

Los últimos datos referidos por la Junta de Andalucía señalan que la construcción de los 40 kilómetros de carril bici se encuentran a un 40% y es que según han remitido desde la Administración andaluza, el verano es clave para adelantar los trabajos. El proyecto, cuyo presupuesto asciende alrededor de los 6 millones de euros, tiene que estar terminado antes de finales de año, como marca el pliego de condiciones.

Desde la Federación Solidaridad adelantan a este medio que van a pedir próximamente la reunión de la Mesa de Movilidad, que se reunió a principios de julio, para expresar todas las quejas vecinales que estaban recibiendo.