La polémica por los avisos del gobierno local a antiguos altos cargos advirtiéndoles que les recortará el sueldo y les cambiará el puesto se ha avivado más tras las últimas declaraciones de la alcaldesa, Pilar Sánchez. En concreto, afectados hicieron público este fin de semana que las medidas tomadas por el Ayuntamiento "son una caza de brujas", mientras que la regidora socialista lo negó este martes y aseguró que el cambio previsto "es justo" cuando se cesa a un trabajador del cargo que ocupaba. Unas declaraciones que ha provocado, según círculos cercanos a los trabajadores, la indignación de los afectados: "Que explique la alcaldesa también si es justo que profesionales del Ayuntamiento durante muchos años estén ahora sin trabajo". Al mismo tiempo, han instado a la alcaldesa a que "demuestre que no hay caza de brujas. Si hace públicos los nombres de los siete trabajadores que están afectados, por el momento, se verá si es cierto o no". Así las cosas, piden a la alcaldesa, Pilar Sánchez, a que especifique "qué otra ocupación se ha dado a los que ha cesado" porque aseguran que "ni siquiera se han dirigido a nosotros".

Por otra parte, en respuesta a la afirmación de la alcaldesa de que el proceso de reestructuración de los altos mandos ya se aprobó en pleno, se cuestionan si a lo que se le dio luz verde "es tocar los altos sueldos o a las personas que no soporta. Desde luego no se entiende como una primera autoridad municipal habla de justicia, con lo injusto que es todo lo que está haciendo". Incluso, subrayan que "lo que esta ciudad se merece es alguien que no mienta tanto, que sea 'justa' y que trate por igual a todos los trabajadores, que eso es lo que realmente está en todos los guiones del mundo mundial".

Hay que recordar que desde el gobierno municipal anunciaron meses atrás que se iba a "optimizar" la plantilla municipal. Así, estaba previsto que aquellos trabajadores que desempeñaron cargos de responsabilidad durante anteriores corporaciones municipales sufrieran cambios en sus condiciones laborales, al ser cesados de sus puestos. De hecho, desde la delegación de Recursos, Juan Manuel García Bermúdez, aseguró en su momento que era imposible cuantificar el número de altos cargos que existía en el Ayuntamiento. La oposición, sin embargo, criticó desde el primer momento el proceso que se estaba llevando a cabo para la ordenación de la plantilla municipal, como mostraron en los plenos votando en contra de las medidas previstas, y esta misma semana el PP solicitó al gobierno municipal información sobre los recortes salariales ya anunciados a algunos trabajadores. Pese a que la alcaldesa, Pilar Sánchez, ha justificado en innumerables ocasiones la necesidad de ajustar la estructura de mando que estaba sobredimensionada, tanto desde la oposición como desde sectores cercanos a los trabajadores piden que se aclare el proceso para comprobar que se está haciendo de forma legal y no de manera arbitraria.