El próximo día 17, la alcaldesa, Mamen Sánchez, y el edil de Economía, Santiago Galván, tienen en Madrid una importante reunión que puede marcar el devenir del Ayuntamiento en los meses siguientes. Ese día han sido citados por el Ministerio de Hacienda para concretar una revisión del plan de ajuste, el documento que traza las medidas que deben adoptarse a nivel económico para equilibrar las cuentas municipales. En esa reunión se verán las posibilidades reales, entre otros asuntos, de que el Consistorio pueda asumir la reincorporación de 120 de los 260 afectados por el ERE (Expediente de Regulación de Empleo) que ejecutó el anterior gobierno del PP en 2012. No será el único asunto puesto que también está por estudiar una nueva refinanciación del grueso de su deuda bancaria (en torno a 532 millones de euros, según datos de 2014).

El equipo de gobierno es reacio a señalar las medidas que planteará al gabinete que dirige, en funciones, el ministro Cristóbal Montoro para modificar un plan de ajuste que asegura que, desde que se diseño en 2013 para poder pagar facturas a proveedores con un crédito de más de 400 millones de euros, se ha incumplido "al 100%". No obstante, los gastos en materia de personal, que se llevan en torno al 43% del presupuesto total del Ayuntamiento, serán un tema central del encuentro puesto que se parte del escenario de la obligación del Ayuntamiento de reducir este capítulo en un 5% anual. En cambio, el ejecutivo sigue aferrado a cumplir con su compromiso de readmitir a los afectados por el ERE, lo que conlleva el consiguiente incremento de este capítulo y, por ende, el incumplimiento de este compromiso.

Para convencer a Hacienda, presentará la propuesta de reducir este sobrecoste con los acuerdos que está intentado llegar ya con los afectados en estos días mediante la renuncia a los salarios de tramitación y días de vacaciones. No será la única medida puesto que el gobierno local quiere reducir algunos gastos salariales (como los complementos de productividad, gratificaciones y demás) -en 2015 esta partida se llevó unos 8,4 millones-. Durante el pasado fin de semana, hubo algunos sindicatos que mostraron su oposición a estas medidas ya que, entre otros reproches, no se han negociado aún. Ante esto, el gobierno local emitió ayer un comunicado donde aseguró que cualquier medida de este tipo irá acompañada de un acuerdo previo con las centrales sindicales pero incidiendo en que es una obligación legal la de reducir la cuantía destinada a personal en un 5%.

Otro de los grandes asuntos a tratar será la posibilidad de que el Ayuntamiento aligere su carga financiera mediante una nueva refinanciación de sus préstamos. En el presupuesto de 2015, destinó unos 11 millones de euros a amortizaciones, una cuantía que se incrementará notablemente en este y en próximos ejercicios ya que se empezarán a devolver los créditos que sirvieron para liquidar facturas de proveedores que son, de largo, los de mayor cuantía que tiene abiertos el Consistorio. Ya lo dijo el anterior gobierno del PP y ahora lo ratifica el PSOE. "Jerez necesita no 20 sino 40 años para devolver su deuda", dijo la alcaldesa en una entrevista concedida a este periódico recientemente. A ello se une que en próximos meses el Consistorio concertará otros dos nuevos préstamos, uno de 49 millones y otro de 38 millones (el primero para liquidar facturas y el segundo para afrontar sentencias judiciales).

No solo se propondrán medidas en el capítulo de gastos sino también en la vía de ingresos. Como ya hiciera en el presupuesto, el gobierno local quiere jugar la carta de que se prevé un ligero incremento de las entradas de dinero en la caja municipal propiciado por la recuperación macroeconómica. De hecho, en el presupuesto del pasado año, que aún está pendiente de ser validado por Hacienda, se contempla este escenario optimista.