"Están engañando a las bases sindicales y a la opinión pública porque está decidido y consentido por las Administraciones que Vicasa se traslada a la fábrica que existe entre Alcalá y Dos Hermanas, dos feudos socialistas". El ex alcalde Pedro Pacheco mantiene su tesis inflexible acerca del contexto que rodea al anuncio de la compañía francesa Saint-Gobain Vicasa, propietaria de la fábrica de botellas, de cesar la producción en su planta de la avenida de Arcos. En su opinión, "el consejero de Empleo [Antonio Fernández] no dice nada porque en este asunto el PSOE no pierde". "Me gustaría que el señor Fernández dijera cuándo le comunicó al Ayuntamiento que Vicasa se trasladaba, desde cuándo este gran profesional de la política lo sabe", se cuestionó el también ex concejal de Urbanismo en voz alta. Precisamente, durante su etapa al frente de Los Arcos entre 2003 y 2007, rememoró Pedro Pacheco, "dejé amarrado un convenio urbanístico con Vicasa mediante el cual hoy ya podían estar inauguradas las nuevas instalaciones". En cambio, señaló, "ha sido la propia empresa la que se ha quejado de que el gobierno municipal socialista estuviese 18 meses sin contestar a su alegación al Plan General para recalificar los suelos". Este argumento es manejado incluso por fuentes del propio gobierno municipal, como así ha podido constatar este medio. Y es que el periodo en el que Fomento, dirigida por el edil socialista Francisco Lebrero desde 2005, mantuvo las negociaciones para el cambio de uso del actual suelo que ocupa la factoría fue "totalmente improductivo" y, como señalan dichas fuentes, "probablemente esos 18 meses hayan sido decisivos para que Vicasa no sólo no vaya a invertir en una nueva planta sino que plantee trasladar su producción de Jerez". No hay que olvidar que la multinacional planteó la necesidad de la recalificación en 2006, en pleno boom inmobiliario en Jerez y cuando aún no había atisbos de crisis financiera. Por contra, el hecho de que hasta el pasado año el gobierno local, a través ya de Urbanismo, no desatascara las negociaciones bien pudo hacer perder un tiempo precioso que, como sostiene Pacheco y otras fuentes consultadas, bien pudo servir para haber certificado la recalificación y la posterior inversión en una nueva factoría.

Sea como fuere, lo anterior no deja de ser un supuesto que en poco o nada ayuda a estas alturas al mantenimiento de la actividad industrial de Vicasa en Jerez. Un cese de producción, a juicio de Pacheco, sobre el que "no puede hablarse de cierre, ya que es un traslado por concentración de producción, de ahí que no sea necesario que la Junta espere papeles para un ERE o para un 'cerrojazo' porque tales circunstancias no van a producirse". "No cabe autorización de ningún organismo, siguen mintiéndole a la opinión pública", insistió. Y añadió: "Esto es una muestra del vacío de poder del Ayuntamiento, de la falta de liderazgo y del poco peso de esta alcaldesa en su partido". "Esto es una balanza y la señora Sánchez no puede con el peso de los señores (Antonio Gutiérrez) Limones y (Francisco) Toscano en el partido", dijo en alusión a los alcaldes socialistas de Alcalá y Dos Hermanas.

Para Pacheco, en todo caso, "si es verdad que el gobierno municipal quiere liderar el tema y comprometerse con Jerez debería pedir ya la cesión de los suelos por daños y perjuicios, y destinarlos a equipamiento público. Además, debe arrancar un compromiso a Vicasa para crear allí una fundación laboral costeada por la compañía en los años que se pacten. Eso, mínimo". "Esa pieza urbana duplicaría el centro actual y dignificaría el entorno", zanjó.