La plantilla de Sergesa Hogar, concesionaria municipal de ayuda a domicilio, está 'quemando' todos sus recursos para pedir a la empresa que se siente en una mesa de negociación para elaborar el "convenio propio" que el comité está demandado desde hace varios meses. De esta forma, durante la manifestación que realizaron ayer, los empleados decidieron cortar el tráfico de la antigua N-IV durante hora y media para "llamar más la atención de nuestra problemática, así que también hicimos una pequeña fogata con ramas y batas de antiguas empresas de este servicio. No ha sido nada premeditado, sino que nos dirigimos a las oficinas de Sergesa -ubicadas en el edificio Andalucía- y como no tuvimos respuesta decidimos manifestarnos en la carretera", apuntó ayer la presidenta del comité, Encarna Barrios.

Esta movilización es la penúltima que los empleados de este servicio habían programado para noviembre, ya que durante todos los martes y jueves del presente mes han secundado huelgas de 24 horas. De esta forma, a un día de finalizar este calendario de manifestaciones, el balance que el comité hace es "muy satisfactorio. Hay que tener en cuenta que este colectivo nunca había salido a la calle para movilizarse y siendo la primera vez, hemos tenido una respuesta muy buena por parte de los trabajadores. Nos hemos topado con muchas trabas y no nos hemos rendido". Pero no tan buena ha sido para la presidenta la actitud de la empresa, de la que resalta que "sigue sin abrir la boca. Nos comunicaron que hasta que no termináramos las movilizaciones no iban a sentarse. Mañana ya acabamos, a ver cuánto tiempo tardan".

Mientras esperan, la plantilla ya está programando la próxima asamblea del 30 de noviembre. "Esperamos tener antes una respuesta de la empresa. Si no es así, ya nos hemos planteado realizar otro calendario de movilizaciones para diciembre, siempre y cuando los compañeros lo aprueben en dicha reunión", apuntó Barrios, quien además recalcó que "ahora no nos vamos a quedar parados, no queremos que este mes de protesta caiga en un saco roto".

Por su parte, la dirección de Sergesa Hogar declaró ayer que "los empleados ha realizado un piquete ilegal que fue dispersado rápidamente por los agentes. Además, ya están dando los últimos coletazos, puesto que menos del 20% de la plantilla ha secundado la movilización". Sobre la negociación del convenio al que está inscrito este servicio -de limpieza de edificios y locales- la empresa recalcó que "se está negociando a nivel provincial y ahí Sergesa no tiene nada que decir. Si los trabajadores quieren mejoras tienen que sentarse ellos, no nosotros. Pero esta empresa acatará todo lo que se indique en ese convenio".

Por último, el gobierno local reiteró ayer que "ante el conflicto laboral en el que se encuentra Sergesa, el Ayuntamiento no tiene ninguna responsabilidad". Así, el Consistorio "no entiende los insultos del que es objeto por parte de los empleados de la empresa en sus manifestaciones, los cuales no se justifican cuando en este conflicto el Ayuntamiento poco puede hacer más allá que jugar un papel lógico de mediador para que las partes alcancen un acuerdo". Sin embargo, la presidenta del comité de Sergesa apuntó que "el gobierno local tiene que mediar aquí, porque después nos piden los votos para ganar las elecciones. Tienen que mirar para todas las partes y no lavarse las manos", y avanzó que "hemos solicitado intervenir en el pleno del jueves. A ver si nos lo concede, porque ya hubo una vez que nos lo rechazaron".