Muere Eloy Pericet, último gran maestro de la Escuela Bolera

El maestro y bailarín Eloy Pericet murió ayer en Sevilla, ciudad donde nació en 1936. Era el último miembro de los Pericet, una saga fundamental en la historia reciente de la danza española, y en particular de la Escuela Bolera, una expresión surgida en el siglo XVIII como resultado de la fusión natural de gestos y elementos de bailes folclóricos españoles con otros estilos dancísticos procedentes de Francia o Italia, un manifestación artística que llegaría a ser muy próxima al flamenco y que arraigó con especial profundidad en la capital andaluza debido en gran medida a la familia Pericet.

El mismo Eloy Pericet reconocía que, a pesar de haber nacido en una escuela de baile, su vida como bailarín hacía sido "accidental". Pese a ello, desarrolló una intensa carrera, acompañado en los escenarios -nacionales e internacionales- por sus hermanos Ángel, Amparo y Carmelita. Con ellos, tras su retirada de la escena pública, se volcó a partir de los años 80 en la formación de jóvenes intérpretes. Fue durante muchos años profesor del Centro Andaluz de Danza (CAD), donde impartió numerosas clases magistrales dedicadas a la Escuela Bolera, declarada por la Junta de Andalucía Bien de Interés Cultural (BIC). También legaron a esa institución varios montajes coreográficos históricos de esta disciplina dancística. La consejera de Cultura, Rosa Aguilar, expresó ayer su pesar por esta "pérdida irreparable". Eloy Pericet, añadió, fue "un gran maestro, una persona que consagró su vida a la danza con enorme generosidad y que ha dejado un inmenso legado para futuras generaciones".

En 1943, Ángel Pericet Jiménez, padre de Eloy, y Ángel Pericet Carmona, su abuelo, elaboraron un manual de pasos que desde entonces hasta hoy mismo sigue vigente como guía fundamental para entender y aprender los códigos de la Escuela Bolera. El Centro de Documentación de las Artes Escénicas de Andalucía y el CAD publicaron conjuntamente en 2013 La Escuela Bolera Sevillana: Familia Pericet, un libro escrito por la periodista y especialista en danza Marta Carrasco que daba testimonio de esta decisiva aportación de la saga Pericet a la preservación y transmisión de esta disciplina.