El guitarrista y compositor jerezano Agustín Castilla-Ávila no para. Creador de un sistema microtonal adaptable a la guitarra dividiendo la escala en 36 notas, en vez de 12, que ha revolucionado el mundo de la música; conferenciante de prestigio sobre ‘El valor de la música y el valor del silencio’ en numerosos países, pintor musical, compositor de óperas clásicas y de guitarra eléctrica con Pablo und Destruktion y ‘Por todo el fuego’..., ahora, dos directores jóvenes de cine se han fijado en su música. El primero es el austriaco Götz Raimund y su película ‘Loslassen’. “Me llamó por teléfono y nos encontramos en Viena para conocernos en persona. Allí me enseñó unas escenas de la película con música mía para guitarra microtonal que había encontrado en Internet. Me pareció muy curioso”, cuenta el artista. Además, Castilla-Ávila tiene la tarea de poner música a otras escenas, así como escribir para su vídeo-performance ‘Exi(bi)t in Motion’.  

El segundo es  el director filipino Anton Juan, en Filipinas, que ha utilizado una pieza para guitarra sola (‘Once’) en su ‘Hinabing Pakpak’.  “Llevamos tiempo hablando e intentando encontrarnos en alguna parte para hablar sobre proyectos operísticos (él es además dramaturgo, director de escena y profesor en la Universidad de Indiana). De casualidad escuchó mi música para guitarra y le gustó mucho esta pieza para su película”, desgrana el guitarrista. “Me interesan muchísimo –añade– los proyectos interdisciplinarios. Los dos directores, muy diferentes uno del otro, son muy poéticos y muy cuidadosos con todos los detalles. Estoy muy contento de colaborar con estos grandes artistas, de aprender muchas cosas con ellos y de que se interesen por mi música”. 

Pero la agenda de trabajo de este jerezano no se queda aquí. El genio inquieto de Castilla-Ávila también se atreve con la guitarra eléctrica.  Junto a Pablo und Destruktion en el Café Berlín ha creado la ópera ‘Por todo el fuego’, que ya ha girado por varios países, entre ellos España, y que se grabó en audio y vídeo en los estudios Ovni de Asturias bajo la dirección escénica de Celso Giménez. El libro disco se editará a finales de año con la Editorial Hurtado y Ortega en Barcelona.

Y ahora tiene que darse prisa para terminar ‘Die Lutherin’ (‘La Luterana’), una ópera quizá “hermana” de ‘Por todo el fuego’ (por la instrumentación) para mezzosoprano, percusión y guitarras eléctricas que le ha encargado Gertraud Steinkogler-Wurzinger sobre la figura de Katharina von Bora, mujer de Martín Lutero. “Aún no sé la fecha del estreno pero posiblemente tendrá lugar en la Universidad Mozarteum de Salzburgo”, apunta. “Y voy a tener la suerte de trabajar con el percusionista español Juanjo Guillem (solista de la Orquesta Nacional de España y fundador de Neopercusión).  En esta obra también participaré como ejecutante”.  Y con guitarra eléctrica va a escribir una obra para el guitarrista filipino Joseph Mirandilla, y otra para el ucraniano Maxim Trianov. Y viajará a México de la mano de la SGAE, ya que el Cuarteto Mexicano de Guitarras estrena su ‘¡Cajones! IV’ en el XXXVIII Foro Internacional de Música Nueva Manuel Enríquez (FIMNME), pieza que le encargaron hace dos años. “La pieza tiene que ver con mis ideas sobre el intercambio de técnicas instrumentales. La obra puede ser ejecutada por guitarristas o por percusionistas. De hecho, la guitarra puede tener más riqueza tímbrica como cajón que el propio cajón. Para mí escribir para piano (por ejemplo), no quiere decir que tenga que hacerlo para un pianista. Desarrollo muchas variantes con el  intercambio de técnicas instrumentales, buscando nuevas sonoridades y la propia belleza de la música. De vez en cuando doy alguna conferencia para explicar estos procesos. La próxima será en octubre en el Congreso Organológico de ANIMUSIC 2016 ‘Times and Challenges’ en Tomar, Portugal”.

Y otro encargo reciente para cuarteto de guitarras lo escribirá para el Aleph Gitarrenquartett de Stuttgart, un referente mundial de la música contemporánea para esta formación. Asimismo, el trío de guitarras ‘Triple Fret’ ejecutará ‘Novem’ (obra que le encargaron) en el Centro Cultural Filipino en Manila el próximo 24 de agosto. Y ‘Norio Sato’ (uno de los máximos exponentes de la guitarra clásica en Japón y director del Nomad Ensemble) tocará el 12 de septiembre su ‘Etimología del Diálogo’ con Joseph Mirandilla en la Universidad de Chengdu 

Y a pesar de que lo que más le gusta al jerezano es la ópera y lo teatral, la guitarra siempre tiene un papel muy importante en su trabajo. “Este año, la difusión de mi música para guitarra está funcionando muy bien. Acaba de salir ‘Aufs Paradies’, coproducido con el Festival de Passau, con piezas de una a cuatro guitarras y narrador”. Y a principios de año ya salió ‘Arvoles yoran por luvyas’ para mezzosoprano y ensemble  con la Asociación Internacional de Compositores, basada en un canto sefardí.  

Hay más música con guitarra que se publicará en los próximos meses: Detlev Bork grabará ‘Once’ y ‘Preludio y Postludio’ para la casa ‘La mà de guido’ y el Cuarteto Mexicano de Guitarras ha grabado recientemente la ‘Danza de Musas y Músicas’ (el CD saldrá a finales de año). En septiembre se grabará la pieza ‘Dos Sonetos’ para guitarra microtonal y mezzo en la Universidad Mozarteum, que editará la Internationale Gesellschaft für Ekmelische Musik.  

También la música para guitarra tiene un papel fundamental en las publicaciones de sus partituras. La Bergmann Edition editará próximamente diferentes piezas (entre ellas el ciclo ‘Caged Music’, los ‘Momentos Microtonales’ o el ‘Preludio y Postludio’). Otras editoriales que han publicado piezas para guitarra son la Doblinger Verlag de Viena y la Joachim Trekel Musikverlag de Hamburgo. 

¿Y cómo ve el panorama guitarrístico actual? “La guitarra goza de muchísima salud. El siglo pasado se estableció como instrumento de concierto, sobre todo gracias a la labor de Andrés Segovia y de otros muchos. En la actualidad tiene un papel muy importante en la música contemporánea, tanto la clásica como la eléctrica. Poco a poco se les exige a los guitarristas más en el repertorio contemporáneo. Por su construcción dispone de muchísimos recursos sonoros, no solo los tradicionales. Estoy seguro de que por sus cualidades, la guitarra va a tener aún más protagonismo en la creación musical de los próximos años. En mi propio trabajo, será siempre uno de los pilares. Es un instrumento que no deja de sorprenderme”. 

Castilla-Avila, afincado en Salzburgo desde hace años, siempre piensa en volver a su país, a su ciudad natal para participar en alguna propuesta. “Hay varios festivales interesados en la obra ‘Por todo el fuego’. Es una obra donde el ejecutante se lo pasa muy bien, o al menos yo me divierto muchísimo”. Aunque reconoce que le cuesta bastante poder “difundir mi trabajo por aquí. Con esto no quiero criticar a nadie, pero me resulta muy difícil el solo hecho de mostrar mi música a numerosos gestores culturales que a veces entienden poco o nada de creación musical. Yo no me quejo, siempre ando liado con bastante trabajo. A veces las críticas ponen a uno por las nubes y otras por los suelos. Todo es válido. Uno debe saber mejor que nadie donde está. En mi lenguaje hay mucho de mi tierra, cosa que llevo con mucho cariño. Ojalá tenga más oportunidades de venir por aquí”.