Su cara ha sido casi habitual entre numerosos programas de televisión. "El chico de los concursos", le dicen algunos por la calle. Al jerezano Manuel Romero Bejarano no le importa que le reconozcan así, "es lo que tiene salir en la tele", dice sin traumas. Comenzó con esta "otra forma de ganarse la vida" hace ya muchos años. Se le ha visto en 'Pasapalabra', 'Saber y Ganar', '50 x 15', 'Euromillón', 'La quinta esfera'... Así, hasta por lo menos diez. Y lo que queda.

- ¿Cuándo fue su primera vez, como concursante, claro?

- Con trece años. En un programa de preguntas de Radio Popular y gané una mesa de estudio con su silla y eso. Recuerdo que empaté con una chica y me llamaron para desempatar. Gané.

- ¿Esto ha sido lo más discreto que se ha llevado en un concurso?

- No, en algunos no me he llevado nada, como en el último, 'El Gran Quiz', del que volví la semana pasada.

- ¿Cuánto es lo máximo que ha ganado?

- Un millón de euros, en 'Pasapalabra'.

- Lo de ir a concursos, ¿es una afición?

- No, es una forma de ganar dinero. Yo no tengo ninguna afición a salir en la tele, pero si se gana dinero...

- ¿Se liga mucho en la tele?

- Mmmmm, nada de nada (ríe).

- ¿En qué invirtió el dinero?

- En esta librería (El Laberinto).

- ¿Y no se tomó las supervacaciones de su vida?

- Pues sí. Ese año, en 2004, estuve en dos meses en Italia, en Japón y en Rusia.

- ¿Le queda todavía algo de calderilla?

- Poco, poco.

- Ningunas vacaciones como aquéllas, ¿no?

- No hombre, casi todas he ido a algún sitio, pero sí es cierto que como las de ese año, no.

- ¿No le importa que le reconozcan por la calle como "el chico de los concursos"?

- No, para nada. Es así y si vas a la tele tienes que aguantarte con eso.

- ¿Se va a presentar a más concursos?

- Claro, a todos los que pueda.

- ¿Da más dinero la tele que la Historia?

- La Historia da poco, ni en esta ciudad ni en ninguna.

- Aunque usted ha invertido en cultura con ese dinerillo que ha ganado.

- Sí, es un negocio al fin y al cabo. Espero que la librería vaya bien. Me conformo con eso.

- ¿Es un riesgo invertir en cultura?

- Bueno, ya lo veré con el tiempo. Ahora mismo es pronto. A ver cómo transcurre este año.

- ¿Se le pasó por la cabeza dejar de trabajar alguna vez?

- No hubiera sido una buena inversión ya que la mitad se lo llevó Hacienda.

- ¿A qué concurso le gustaría ir?

- (Risas). Al de la selva de los famosos, 'Supervivientes', me encanta. Y yo hubiera ido al 'Grand Prix', después de hacer un botellón.

- ¿Qué se llevaría pues a la selva?

- Pastillas para la diarrea y algo para pescar.

- ¿Un libro no?

- No. Se estropearía. Podría estar tres meses sin leer. Tampoco pasa nada.

- ¿Le ha dado el dinero muchas satisfacciones?

- Bueno, algunas: irme de vacaciones, montar esta tienda, que sí que es una satisfacción porque si no hubiera sido así, tendría que haber esperado mucho.

- ¿Qué es lo primero que pensó cuando ganó tantos millones?

- Yo creo que lo primero que hice fue descansar porque fueron muchos programas, 50. Y mucha alegría, claro.

- ¿Sus próximas vacaciones soñadas?

- Irán. Incluso me iría solo. Con quien se tercie. Hay que elegir bien a los compañeros de viaje. Irán no es para ir con cualquiera.

- ¿Qué es lo que le da más calor de una ciudad?

- Que a la gente le dé igual ocho que ochenta en cuestiones como el patrimonio histórico. La gente se llena la boca hablando de Jerez y después no se mueve un dedo

por nada.

- ¿Qué refrescaría de Jerez?

- El sentimiento ese de ser ombligo del mundo: "qué bonito es Jerez, y después de Jerez no hay nada"... Todo esto termina haciendo daño.

- ¿Qué adora de esta provincia?

- Sus playas.

- Recomiende un libro refrescante.

- Mi libro (risas). No hombre, esto no estaría bonito. El último que me he leído y me ha gustado mucho es: 'Buscadores de belleza. Historia de los grandes coleccionistas de arte', de María Dolores Jiménez-Blanco y Cindy Mack.