Baelo Claudia retoma el escenario en que siglos atrás representaban sus obras nuestros antepasados romanos. El teatro se rinde por segundo año consecutivo al encanto de las Lunas de Baelo, del Ciclo Músicas del Sur, que regresará cada noche de los viernes y sábados del verano, desde el 5 de julio, hasta el 31 de agosto.

Era Cultura vuelve a fusionar música y arqueología en esta singular iniciativa con la que arriesgaron el pasado año, y acertaron, a juzgar por la respuesta del público. Tanto es así, que este año repiten con un cartel en el que también reinciden algunos grupos. Entre ellos el grupo EA! (6 julio, 3 agosto, 24 agosto); Antonio Lizana (5 de julio; 16 de agosto); o la Banda Morisca (9 agosto, 23 agosto, 31 de agosto), al que este año se suman otros artistas de la talla de Tito Alcedo (12 de julio, 22 agosto), Nono García (22 agosto); Glazz, que se acompañará de Javier y Lucía Ruibal (19 de julio), Tarab Al Andalus (31 de agosto) Carlos Chaouen (17 agosto), así como Paula Gómez (30 agosto), Rycardo Moreno (29 agosto), Javier Marín (13 julio), Músicas y danzas sagradas Gudjieff (26 julio), Caeman (2 agosto) y Lila Horovitz (27 julio).

La actividad consiste en realizar una visita guiada por la ciudad romana de Baelo Claudia de una hora de duración, a partir de las 20.00 horas, una hora amable para pasear por la ciudad. "La puesta de sol, con la ensenada de Bolonia de fondo y el cielo desplegando una cantidad de olores y de matices inenarrables, son el acompañamiento perfecto mientras paseamos por la ciudad acompañados por un equipo de arqueólogos, que aunando rigor y amabilidad, nos guiarán a lo largo del recorrido", informan desde la organización. Un itinerario que estará marcado por las aproximadamente diez paradas que se realizan, a lo largo de las cuales se contemplará la necrópolis, la muralla, el foro con los templos y la basílica, la factoría de salazones, las domus, el macellum, las termas y, como colofón, el teatro, donde los espectadores disfrutarán del espectáculo musical de la noche, completamente sumidos en el espíritu de Baelo Claudia.

El espectáculo durará aproximadamente una hora y media, y tiene cabida para unas 250 personas, que es el aforo del espacio teatral donde hace casi dos mil años se realizaban otro tipo de representaciones.

El conjunto arqueológico declarado monumento histórico arqueológico nacional abre sus puertas, por cierto, exclusivamente para este tipo iniciativas privadas y complementarias, pues como novedad Baelo cierra en las tardes durante todo el verano, pese a ser uno de los enclaves turísticos que incrementa muy considerablemente el número de visitantes durante los meses más calurosos, al estar enclavado en un espacio paradisíaco anexo a la playa. Si bien, cabe recordar que el pasado año el conjunto de Tarifa vio descender el número de visitas en unas 5.000 personas (de 149.783 a 144.713), que la delegada de Cultura, Cristina Saucedo, achacó en su día a a la regulación del tráfico que se hizo el año pasado la Policía Municipal en Bolonia, a lo que sumó las lluvias que tuvieron lugar el pasado mes de octubre y noviembre, que llevó a la cancelación de reservas.

Próximamente, la delegación de Cultura presentará el resto de actividades que tendrán lugar en la ciudad romana de Baelo, que el año pasado fue el escenario de visitas teatralizadas por parte de Hespérides Gestión Cultural -presente en el enclave desde 2005- y Arq. Heritage Innovation, que propuso un recorrido sensorial donde no faltó la música, cultura, aromas y paisajes.

Todavía no se ha desvelado el programa del próximo verano, donde Baelo abrirá de nuevo sus puertas a la iniciativa privada.