Undécimo día de concentración y desde el primero utilizando ya la que será la nueva herramienta de trabajo hasta el 16 de mayo, fecha en que termina la Liga. Los futbolistas del Sevilla ya han jugado, además, dos amistosos con el nuevo balón de la LFP, que será el oficial en la temporada 09-10 también en la Premier League y en la Seria A italiana. A simple vista cambia poco, con esos dibujos vanguardistas, pero los que están en contacto continuo con él aseguran que es más ligero y que adquiere más velocidad en el aire cuando se dispara con él. Particularmente los porteros son los que más diferencias han notado y los que menos, los defensas, ejemplo de que también influye el uso que cada uno le dé, ya que éstos no acostumbran a realizar el golpeo seco de un delantero o un extremo porque no tienen que imprimirle velocidad. Lo más que pueden hacer es un lanzamiento en largo, por regla general bombeado, y ahí las nuevas propiedades que le han querido dar los ingenieros de Nike no son tan determinantes.

El T90 Ascent fue testado en el túnel del viento en el Parque Tecnológico de Miñano (Álava). Ahí determinaron que es un ocho por ciento más aerodinámico que el anterior y, por tanto, más rápido. Lo que en un Fórmula 1 equivaldría a 18 kilómetros por hora más veloz. Según sus fabricantes, la micro-textura del material hace que el viento fluya por la superficie aumentando el nivel de precisión y de control sobre el mismo. Pero claro, aumentando también su velocidad.

"Sí, lo veo más rápido, pero es que cada año lo hacen más rápido... No se nota mucho en el juego normal, el bote es igual y eso, pero sí un poco cuando le pegas. Sale como más ligero, más fuerte". La primera opinión es de Fazio, un futbolista que, pese a no llegar mucho a puerta, posee un disparo potente. Pero hay opiniones para todos los gustos. Escudé, por ejemplo, no ha notado nada. "¿Han cambiado algo? Yo lo veo igual, no sé... Yo tampoco puedo decir mucho, porque me he incorporado más tarde. No sé lo que han dicho los demás. ¿Más rápido? Puede ser, pero tengo que probarlo más. Me voy a fijar a partir de ahora".

Es importante la opinión de un portero, cuyo contacto con el esférico no tiene nada que ver con el de un futbolista de campo. Se prestan Palop y Javi Varas. El que da más detalles y el que más cambios ha notado es el de Pino Montano. "La sensación que da es que es más rápido y también el tacto es diferente. No sé, lo tocas y es distinto. Tiene como unos cuadraditos y está plastificado, como forrado". Se refiere Varas a las tres capas de micro-textura que le dan un tacto especial. Los "cuadraditos" son como unas celdas de panal de abeja que envuelven toda la superficie. Visualmente, además, sorprenden unos motivos que recuerdan a los conocidos transformers, dicen los técnicos que para facilitar la visión cuando el balón va por el aire. También es novedad, además del logotipo de la LFP, el de La Quiniela.

Cada uno recuerda balones con los que más o menos se sentían a gusto. Javi Varas, por ejemplo, no olvida con el que jugó hace un año dos amistosos en Holanda y en Moscú por una lesión de Palop. Se acababa de ir De Sanctis y le sirvieron para demostrar que es un portero de garantías para suplir al valenciano en cualquier momento. "Si te tengo que decir algo, a mí se me parece al de la Eurocopa. Yo la Eurocopa no la jugué -bromea-, pero en Amsterdam y en Moscú jugamos con ese balón. A mí éste (el nuevo) la impresión que me da es que sale más rápido, depende también de quién lo golpee. ¿Movimientos raros? No, sólo que lleva un poco más de velocidad, aunque me gustaría verlo con Cristiano Ronaldo, que le pega con el empeine plano. También es verdad que estamos en los primeros días, aunque en dos entrenamientos te acostumbras. Después habrá que verlo en otras condiciones, porque puede cambiar mucho de seco a mojado", dice el guardameta. Su compañero Palop es menos explícito, pero da la clave con la prueba del agua que menciona su compañero: "Yo lo noto más o menos igual. Es un poco más rápido, pero también lo achaco a que venimos de estar de vacaciones y uno también está un poco más lento, pero sí, no te voy a decir que no. Sobre todo mojado. Cuando coge agua, con el bote en disparos rasos, se dispara". Se refiere el valenciano a ese leve contacto del balón con el césped que tanto odian los porteros a un metro de sus manos cuando un delantero ha lanzado un tiro raso y fuerte. Ese bote, con el agua, hace que la velocidad aumente por el deslizamiento, una especie de aquaplaning, lo que añadido al cambio de dirección suele convertirse en peligro inminente de gol. "Está claro que ahora no está lloviendo (bromea), pero nosotros mojamos el campo de entrenamiento para poner el césped un poco más rápido".

Jesús Navas nunca ha sido muy hablador. Confiesa que le parece igual que el anterior y que lo que espera es marcar muchos goles y dar muchos asistencias con él: "A mí me gusta. Yo no noto mucha diferencia, pero la verdad es que está bien. Me encuentro cómodo".