Había hablado Inmobiliaria Iberdrola y los promotores 'novedoso' del colegio. Ahora le toca el turno a los afectados del Centro Educativo Jerez. A raíz de la denuncia de la compañía en la que pedía a los promotores del colegio que abandonaran el edificio donde tienen su sede (Parque Empresarial) por "incumplimiento de cláusulas", nace la plataforma de afectados por la presunta "estafa" del CEJ. Una iniciativa "privada e independiente, al margen de cualquier vinculación política o sindical", que tiene como objetivo defender los intereses de los socio-trabajadores, empleados y las familias que se han visto afectadas tras haber aportado cantidades económicas al "fallido proyecto educativo o al preinscribir a sus hijos en un centro de estudios fantasma".

La incertidumbre sobre el futuro del centro ha supuesto "un duro revés difícil de comprender y asimilar" por una plantilla de prácticamente 50 empleados, de los cuales más de una treintena son socios-trabajadores y que, además de su trabajo e ilusión, han invertido "entre todos en este proyecto la friolera de un medio millón de euros".

La plataforma de afectados se pregunta ahora, ante la decisión de Inmobiliaria Iberdrola y sus consecuencias, "qué clase de gestión han realizado los promotores del proyecto, quienes han tenido negocios similares con dudosos resultados, para ver en qué medida esta situación podría haberse evitado o no. Ver si la viabilidad del proyecto es real o no y, en definitiva, ver si existen otro tipo de irregularidades de base, en la inadecuada administración de recursos económicos que ha quedado al descubierto y hace temer que, quizás, estemos ante un caso de presunta estafa".

De cara a estudiar medidas comunes legales, representantes de la plataforma se reunieron ayer con la alcaldesa, María José García-Pelayo, en el Consistorio. Del encuentro, el colectivo sólo pudo decir que "el Ayuntamiento iniciará los trámites internos que están en su mano para poner cada cosa en su sitio".