Cuando Cheryl Studer oyó por primera vez un disco de María Callas, entendió que debía dejar sus estudios de piano y viola para dedicarse de pleno al canto. Por aquel entonces contaba doce años y de forma inmediata inició sus estudios en Mildland (Michigan), lugar donde nació. Fue en Viena, sin embargo, algunos años más tarde, donde perfeccionaría su técnica de la mano del barítono alemán Hans Hotter. Su voz logró atraer la atención de, entre otros, al mismísimo Leonard Berstein, quien le ofreció, por un periodo de tres años, una beca.

En 1976 debutó con la Orquesta Sinfónica de Boston en 'La pasión según San Mateo', de Juan Sebastian Bach, dirigida por Seiji Ozawa. Algún tiempo después inició su carrera operística como miembro de la Ópera de Munich, y tras el triunfo en el rol de Irene de Rienzi, le llegó la oferta para debutar en la Ópera Lírica de Chicago y en el Festival de Bayreuth. Fue justamente en ese certamen donde estrenó su papel de Elisabeth, en Tannhauser, dirigida por Giuseppe Sinopoli en 1985.

Además de la grabación de uno de los discos más importantes de su carrera, esta ópera fue el inicio de su relación estrecha con la música de Wagner, que le ha llevado a interpretar más de una docena de personajes de este compositor.

Pero, realmente, su repertorio es muy amplio y demuestra una gran versatilidad. Lo mismo ha cantado con maestría la Reina de la Noche, en 'La flauta mágica' de Mozart, que la Lucia de Donizetti. Además, ha interpretado en numerosas ocasiones a las heroínas de Richard Strauss. Todo esto, siendo importantísimo, viene acompañado por haberse convertido en una especialista del repertorio romántico alemán.

Además de los más de 75 papeles de ópera que ha encarnado a lo largo de su carrera, Cheryl Studer ha actuado como solista de concierto en compañía de las mejores orquestas del mundo.

En el repertorio que podremos escuchar hoy, a partir de las nueves de la noche, habrá piezas de Schumann, Brahms, Malher o Richard Strauss, que a buen seguro harán disfrutar a los abonados y a todos aquellos que quieran escuchar a Studer, primer premio en el Festival de Cannes por las canciones completas de Samuel Barber que grabó con Thomas Hampson y John Browning.