La hostelería de Jerez roza la excelencia en todos los aspectos, además es diversa, ya que, de lo puramente tradicional se puede pasar a lo más vanguardista, a la comida fusión o a platos importados de otras culturas con un plus 'made in Jerez'. Bien lo sabe uno de los chefs más prestigiosos de la ciudad, Juanlu Fernández chef de Lu Cocina y Alma, el primer restaurante con estrella Michelín de Jerez, y de la cafetería y pastelería Krombol Bakery, recientemente reconocida con un 'Solete' de la Guía Repsol. De ahí que, antes de comenzar las recomendaciones, subraya que en la ciudad hay muchos "sitios buenos", además de los que él menciona. 

El chef arranca la jornada de jerezanas maneras, invitando a tomar el desayuno en un establecimiento más que emblemático, toda una institución: La Moderna, ubicada en calle Larga, próxima a la rotonda de los Casinos. "Te tomas una tostada con manteca colorá, con mi amigo Alfonso". Posiblemente sea una sugerencia en la que estén de acuerdo casi el cien por cien de los jerezanos y que no defreaudará al visitante. 

La Moderna.

A eso de las doce y media o una de la tarde, hora del aperitivo, nos lleva al Tabanco El Pasaje. Allí casi es obligatorio degustar unos "chicharrones especiales con un poquito de limón y sal, con una copita de amontillao, mientras ves un poco de flamenco. "Quien pise Jerez tiene que hacerlo", sentencia.

Tabanco El Pasaje.

A pocos metros, en un breve y bonito paseo, te traslada al restaurante La Carboná para el almuerzo. "Javi siempre me guarda algunas piezas que se consumen menos como las aletas, los cogotes o las parpatanas que son súper jugosas. Los puntos del pescado al carbón de La Carboná son increíbles. Me encanta mancharme las manos". 

Plato de La Carboná.

Entre comida y comida, el chef aprovecharía para dar un paseo por el centro de Jerez por plaza Plateros, tomar un helado en calle Larga o sentarse con un café en El Gallo Azul. También aconseja visitar una bodega como González Byass a quiene no conozcan qué es y cómo nació el vino de la tierra, "creo que eso es súper importante". 

Plato del Restaurante Mantúa.

Una vez hecho hueco y para terminar, Juanlu recomienda una cena de gala en el restaurante Mantúa que también presume de estrella Michelín. De Israel Ramos, su chef, destaca la sensibilidad al cocinar. "A través del plato te hace viajar por los sabores tradicionales, los reinterpreta y tiene un gran maridaje con los vinos de Jerez". Y la guinda a una jornada gastronómica exquisita como la que aconseja, la pone una última copa en el jardín del Palacio María Luisa. "El espacio es una gozada, con un ambiente muy agradable. Si la noche acompaña, no te quieres ir de allí". Además hay para elegir, pues preparan deliciosos cócteles.