El Ayuntamiento ha estallado. El estrangulamiento económico y financiero provocado por una deuda de casi mil millones de euros y un insoportable volumen de gastos en proporción con los ingresos ha llevado al Consistorio al colapso más absoluto. Como un minucioso análisis forense, un informe de la tesorería municipal encargado por el nuevo gobierno local del PP, dentro de la auditoría interna que ha llevado a cabo, añade aún más patetismo a la coyuntura actual. "En la parte de los pagos, hay una situación de facto de suspensión de los mismos", reza el análisis, al que ha tenido acceso Diario de Jerez, en sus conclusiones. Y lo que es aún peor, añade taxativo, "sin capacidad de planificación y sin posibilidad de atender en plazo los compromisos básicos de la Corporación, desde el pago de la nómina al personal al pago de los suministros, servicios básicos y los compromisos financieros". "La situación actual de la tesorería es la de colapso anunciado en anteriores informes y planes financieros anuales", alude con cierta resignación hacia la poca o nula efectividad de los planes de saneamiento y viabilidad puestos en marcha en el Consistorio jerezano en los últimos años.

Todo esto se ve agravado, como ya admitió en días pasados la propia alcaldesa, María José García-Pelayo, por el hecho de que ni siquiera haya una tenue luz en el apartado de ingresos a corto y medio plazo, puesto que hasta los fondos previstos para los próximos años están ya en buena parte comprometidos. Hay infinidad de deudas (casi mil millones de euros en cola), no hay liquidez y apenas hay margen para obtener cash a corto plazo. El tesorero, que como se ha dicho viene alertando de esta situación de "colapso" de forma reiterada, pero con especial énfasis desde principios de año, lo recalca en su exposición: "En los ingresos, se ha dispuesto de los recursos de la recaudación del ejercicio; se está produciendo la retención de los ingresos del Estado por deudas; y hay una parálisis de la recaudación ordinaria de impuestos y tasas por la crisis económica". En este sentido, mantiene que las "únicas fuentes de ingresos estables y periódicos con que cuenta el Ayuntamiento, la PIE y los anticipos de recaudación, han sido muy alterados", tanto por la citada retención de los ingresos estatales como por los ya mencionados compromisos (tomas de razón) con los anticipos de recaudación que gestiona Diputación.

Ante esta situación "crítica" de la que tesorería municipal, según asegura, viene informando "de forma reiterada", son precisas "medidas urgentes, extraordinarias e inmediatas" para intentar evitar "graves consecuencias de la situación descrita". Si ya en enero se advertía de que "existe riesgo cierto de colapso de la tesorería que se acentuará a medida que transcurra el ejercicio", ese momento ya ha llegado. A día de hoy, reza el informe, el Ayuntamiento no puede garantizar el pago del líquido de la nómina municipal; no puede asegurar en el ejercicio el pago del corriente de la Seguridad Social y la Agencia Tributaria; ni tampoco el cumplimiento de los compromisos financieros ni con proveedores esenciales. Por si fuera poco, el análisis de la tesorería vuelve a dejar a las claras que "existe riesgo de incumplimiento de la justificación de las obras y programas subvencionados a nivel estatal, autonómico y europeo; y no existe capacidad de respuesta de la tesorería para el cumplimiento de sentencias judiciales firmes, con las consecuencias que dicho incumplimiento pueda tener".

El solar municipal, sintetiza el análisis en sus más de treinta folios, se basa en "la ruptura desde hace años del principio de limitación presupuestaria, la inaplicación de las medidas legalmente previstas para absorber el remanente negativo de tesorería y la aplicación constante de soluciones de financiación de carácter financiero sin atajar el problema económico de fondo". En este punto, el análisis se detiene en la gestión infructuosa durante años de los diferentes planes de saneamiento y viabilidad puestos en marcha por los sucesivos equipos de gobierno desde 2003 -el último Plan de Viabilidad fue aprobado en el pleno de diciembre de 2009 por el PSOE en solitario-. "Dichas medidas llevan años sin ponerse en práctica, y los planes de saneamiento que se han ido poniendo en marcha sucesivamente se han aprobado como requisito para acceder al endeudamiento, o bien como medida bienintencionada sin ningún seguimiento o evaluación". Una circunstancia, ésta última, que ha provocado que "la práctica diaria se haya encargado de dejarlos obsoletos en pocos meses por el no cumplimiento de ninguno de los objetivos previstos".

Del mismo modo, el informe de la tesorería también se muestra especialmente duro con el hecho de que la publicación de la ley de estabilidad presupuestaria y su reglamento para administraciones locales, y sus medidas de reacción frente a las situaciones de desequilibrio, "tampoco hayan servido para que esta Corporación reaccione y dé cumplimiento a lo establecido en esa normativa". Algo similar ocurre con la "constante llamada a soluciones financieras". Patadas 'adelante' a las deudas a través de operaciones bancarias que el análisis oficial desgrana en tres procedimientos demasiado habituales en todos estos años: recurso a operaciones financiero-patrimoniales, como concesiones administrativas o demaniales, como las de Cirjesa o Ajemsa; recurso a operaciones financieras "atípicas" como la adquisición de deuda comercial por las entidades financieras; y la "recurrente" búsqueda de financiación a corto y la correlativa necesidad de incrementar el límite de endeudamiento.