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Jerez

El cinturón del SAS

  • El Hospital de Jerez mantiene sin uso, una vez terminado el verano, dos plantas y 65 camas. Los médicos afirman que no pueden dedicar más de cinco minutos a los pacientes. ¿Ahorro o recorte?

Lejos de recuperar la normalidad tras el verano, el hospital de Jerez mantiene cerradas dos plantas, la de Medicina Interna y la de Ginecología y alrededor de 65 camas, entre estos dos servicios y Pediatría, donde se han dejado en reserva la mitad de sus 30 camas. La dirección del centro sanitario ha ofrecido a los sindicatos la curiosa explicación de que en los dos primeros casos no se están produciendo ingresos, por lo que no es preciso mantener abiertos los servicios, aunque las camas estarían operativas en el momento en que la demanda lo exigiese. En concreto en Ginecología, el hospital aprovechará para realizar algunas obras de mejora en las habitaciones y baños, habilitando también un nuevo espacio para los bebés. Aunque son habituales las obras de remodelación de las instalaciones, son 'lavados de cara' que se acometen en verano, precisamente cuando la acividad asistencial es menor, pero nunca se han llevado a cabo en épocas (otoño-invierno) en las que la alta frecuentación por la llegada de determinadas patologías obliga incluso a la puesta en marcha de planes específicos.

En lo que respecta a Pediatría, el hospital ha decidido ahora recuperar la iniciativa de las habitaciones individuales para los niños, una experiencia que ya se llevó a cabo hace unos años de forma fallida ya que el número de ingresos obligó a volver a las habitaciones dobles. Las camas no se han retirado de las habitaciones, pero no se ocupan y los auxiliares de Enfermería en este servicio se han reducido también a la mitad. De esta forma, el hospital cuenta ahora con una 'plantilla colchón', especialmente auxiliares de Enfermería, antes en Medicina Interna y Ginecología que trabajan en una u otra planta en función de las necesidades. Aunque en ningún momento el Servicio Andaluz de Salud ha hablado de recortes, a nadie se le escapa el ahorro en gasto de personal que supone el cierre de camas, ya que han descendido de forma drástica las contrataciones para sustituciones y las que se hacen son de un día para otro y por períodos mínimos, incluso de una semana o diez días. Según ha trasladado la gerencia del centro al sindicato CSIF, se trata de optimizar al máximo los recursos para hacer frente al último trimestre del año, cuando ya el presupuesto está prácticamente agotado, pero se desconoce las directrices que se seguirán a partir de enero con respecto a estos recortes encubiertos.

El número de camas cerradas cuando está a punto de acabar octubre coincide prácticamente con las que se dejaron en reserva en el verano, alrededor de 70, un hecho que ya hasta los propios sindicatos y usuarios han asumido sin excesivas críticas después de años de aplicarse los mismos cierres durante los periodos vacacionales de la plantilla. No obstante, cada 1 de octubre el hospital, que dispone de 518 camas, un centenar menos que hace una década, volvía a recuperar la normalidad y su capacidad asistencial, algo que no ha ocurrido en esta ocasión. El representante del CSIF en el hospital, Gabriel Ruiz Ordóñez, señala que esta "optimización" de los recursos se está observando también en un mayor control sobre el trabajo y horarios de la plantilla. "En consultas que acaban antes porque fallan varios pacientes de los que estaban citados, el personal tiene que seguir inmediatamente en otra de las consultas, cuando antes había mayor relajación en este terreno". En lo que respecta a los recortes de camas, Ordóñez únicamente objeta los desajustes que pueden producirse en el momento en que haya un incremento importante de los ingresos. "Si a las tres de la mañana ingresan varios niños aunque las camas se abran es imposible localizar en el momento al personal, o en cualquier caso se haría recurriendo a trabajadores de otros servicios, con lo que éstos se quedarían cojos". Los quirófanos, tras una serie de problemas que ralentizaron su operatividad al 100% el pasado mes y dispararon los plazos de la lista de espera, sí han vuelto, según este sindicato, a su funcionamiento habitual.

En el Puerta del Mar de Cádiz son casi un centenar las camas que están "reservadas", es decir, sin uso, según ha denunciado el sindicato Autonomía Obrera. Y, de hecho, la dirección no lo niega. Dolores Alguacil, máxima responsable de este centro, afirma que se ha invertido este verano un millón de euros en reformas, y que esa ha sido la causa de que algunas camas sigan reservadas, pero que se utilizarían, en caso de necesidad, "inmediatamente". Sin embargo, el sindicato que lo denuncia no suelta la presa y dice que la bolsa de contratación apenas se mueve porque el personal es trasladado de una unidad a otra, cerrando camas de manera alternativa. La gerencia niega este extremo y asegura que la disminución de pacientes ectópicos (aquellos que están ingresados en unidades diferentes a las que necesitan)es una muestra de ello. "Ahora mismo es casi irrelevante".

"¿Recortes ocultos? ¿Ocultos? Reducen camas hospitalarias, no cubren bajas, hay urgencias que son parachoques con un único médico, no terminan dispositivos que estaban previstos, colocan los objetivos de reducción de gasto farmacéutico en parámetros imposibles. ¡Te controlan hasta las tiritas que usas! Claro que hay recortes". Este lamento de un médico de atención primaria de Jerez es corroborado por los sindicatos médicos y de enfermería. Chiclana batió el pasado verano el récord de atención de urgencias por un solo médico en una guardia. Casi 200. Chiclana, localidad de aluvión sin hospital, pero con gran población estacional sufrió el recorte de un 50% de personal en Urgencias. Es decir, había dos por guardia y se quedó en uno. En pleno debate por el brutal tijeretazo a la sanidad pública en Cataluña, que para muchos camufla una privatización, los profesionales de la sanidad andaluza empiezan a preguntarse si se traspasa el límite del ahorro para introducirnos en una zona gris que encamina al recorte.

El Sindicato Médico Andaluz ha realizado un estudio que ha entregado a la dirección de Recursos Humanos del SAS. El dato más significativo es que la media de tiempo por consulta de cada médico apenas es de cinco minutos. "Los médicos de Atención Primaria están sobrecargados y el SAS lo sabe". No han recibido respuesta. "Desde hace varios años, el SAS no autoriza incrementos de plantilla de facultativos de centros de salud de la provincia ni de los hospitales de referencia y, todo ello, a pesar del crecimiento natural de la población. Hay médicos de familia que se ven obligados a atender a 50 y 60 pacientes diarios y en algunas ocasiones hasta 80. ".

Si esto es así, lo cierto es que los índices no lo detectan. Andalucía arroja buenos datos en listas de espera y satisfacción del usuario, lo que la sitúa en un lugar alto dentro de los sistemas de salud de Europa. El último barómetro sanitario del CIS, con entrevistas realizadas en 2010, muestra que un 48% de los usuarios andaluces piensa que la atención primaria ha mejorado en los últimos cinco años y sólo un 3% considera que ha empeorado. El tiempo que los médicos dedican a cada paciente se puntúa con un 6,56 sobre 10. No está entre los mejores de España, pero tampoco entre los peores. Todo ello pese a que el gasto por habitante no es el más alto de España, situándose en 1.245 euros, no muy lejos de una media nacional de 1.288, pero lejísimos de Euskadi, donde la sanidad pública tiene una ratio per cápita de 1.675 euros.

La consejera de salud, María Jesús Montero, reconoce que ajusta gastos, pero no acepta la palabra 'recorte' en una entrevista con el diario Público. "Había partidas que podían ser gestionadas más eficientemente. La crisis ha sido una oportunidad para ser creativos y explorar mejoras". Pero el PP sí utiliza la palabra 'recorte' y lo cifra. Antonio Sanz, portavoz de los populares, realiza el siguiente desglose: 3.600 millones de euros en los últimos cuatro años. 200 millones en 2008 (entre ellos, 156 millones en inversiones); 1.079 millones en 2009 (332 millones en atención sanitaria directa o 75 millones en inversiones); 999 millones en 2010 (205 millones en atención sanitaria), y 1.396 millones en 2011 (entre ellos, 642 millones menos presupuestados respecto al ejercicio anterior). Esos no son los datos del SAS, que sitúa la reducción de gasto en otros conceptos: 300 millones de euros vienen de la reducción del salario a los funcionarios, otra parte viene del ahorro de un 5% en farmacia y otros 186 millones para cuadrar cuentas son los no gastados en equipamiento previstos. Así se ha pasado, "sin recortes", a mantener un 31% del total del presupuesto de la comunidad, lo que son 8.600 millones de euros en 2011.

Lo que Montero llama 'ser creativos' lo expuso el director gerente del SAS, José Luis Gutiérrez, en el año 2009, en Málaga, dentro de un foro organizado por el despacho Garrigues y Dopp Consultores: "La fórmula es crear Unidades de Gestión con distintas especialidades y que intervendrán en el proceso integral de la atención al paciente. Esta medida va acompañada de otras como la optimización de los recursos o la contención del gasto, que ha disminuido la previsión de déficit a una tercera parte del que hubiéramos tenido sin tomar medidas". Esas unidades de gestión son "unidades de presión" jerarquizada, según explica uno de los profesionales de atención primaria consultados. "El responsable de cada centro llega al final de año con el presupuesto para todo el año gastado y teniendo que acabar recortando de todo lo que puede".

Esto se traduce en una realidad palpable. Gran parte de las camas hospitalarias que tradicionalmente se 'cierran' en verano, siguen 'cerradas' a día de hoy. No es posible conocer la cantidad total porque no todos los centros proporcionan los datos, pero en casi todos los consultados en la provincia se excusa con trabajos de mejora o, sencillamente, que no son necesarias porque, de repente, no hay ingresos.

Lo que dibuja el Sindicato Médico es mucho más crudo: "Al recorte habitual en los meses de verano se suma el recorte adicional en los meses que quedan de año con recortes en la continuidad asistencial en servicios tan importantes como Cardiología, Cirugía Maxilofacial, Cirugía Vascular, Radiodiagnóstico o Unidad de Cuidados Intensivos. Todo ello conlleva a una sobrecarga de las consultas de revisión con tiempos de espera en las consultas de revisión de varios meses en servicios como Neurología y Reumatología. Para paliar la demora, el SAS aumenta el número de pacientes en consulta de cada médico, con lo que disminuye el tiempo que se le puede dedicar a cada paciente".

Una vez más, la Consejería esgrime sus datos y se muestra convencida de que estas 'fórmulas' de ahorro no perjudican la calidad asistencial. Lo más fácil es medirlo con datos de listas de espera en lo apremiante, la cirugía. Al contrario que en las camas, ningún quirófano ha cerrado y los plazos de espera para las operaciones son razonables y muy lejos del tope que se ha autoimpuesto el propio SAS, 180 días para las no urgentes y 120 para las urgentes. En junio pasado en la provincia había 5.300 pacientes pendientes de una operación no urgente. El plazo máximo de espera se encontraba en el hospital de Puerto Real, con una media de 53 días. Punta Europa iba detrás con 50 días, luego Puerta del Mar con 48 y, por último, Jerez con 46 días, que tenía 1.314 en espera, con un tope máximo para operaciones de rodilla situado en 71 días.

Las 500 quejas recibidas por el Defensor del Pueblo son una alerta de hacia dónde se dirige nuestra sanidad. Afirma su informe: "El hilo conductor que aglutina el medio millar de quejas que suelen plantearse es que es insuficiente en su intensidad, en su cartera de servicios o de los recursos humanos (déficit de pediatras) y, en los casos más graves y dramáticos, como expresión del dolor por el fallecimiento de un familiar o allegado".

Carmen Francisco, presidenta de la Sociedad Andaluza de Cuidados Paliativos, ofrece otra visión del actual panorama de la crisis en la sanidad y aboga por un "ahorro inteligente". Según Francisco, "con la Ley de muerte digna la Consejería ha priorizado los cuidados paliativos de los enfermos. Esto no necesita más camas de hospital, todo lo contrario. Un día en el hospital es muy caro y con ese dinero se puede dar atención domiciliaria de muy alta calidad. En Andalucía se han creado 63 equipos de cuidados paliativos que atienden al paciente donde el paciente quiere estar, en casa. Cada uno de esos equipos supone un ahorro de dinero y permite que, siguiendo el Plan de Cuidados Paliativos, cuando sea necesaria- la hospitalización ésta se pueda realizar en habitaciones individuales". Como dice la consejera, creatividad.

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