Desde que en 1989, Tomasa Guerrero 'La Macanita' se presentó en solitario en el mercado discográfico con 'A la luna nueva' (Twins Records), sus acercamientos al estudio han sido variopintos y con todo tipo de propuestas, algunas de carácter comercial que intentaron llevarla a terrenos actuales, y otras de gran pureza que calaron entre sus seguidores más fieles.

Aquella primera incursión, Twins Records, llegó de la mano de otros tantos artistas jerezanos como Capullo de Jerez o El Torta, y sirvió a la joven cantaora para abordar cantes que hasta entonces apenas tenían protagonismo en su repertorio, llámese colombianas y rumbas. El disco seguía por momentos los cánones simples pero en otras ocasiones abordaba territorios acordes a la época en la que se grabó.

Mucho más clásico, quizás el que más de todos los que ha grabado, fue 'Con el alma' (Audivis, 1992), donde Tomasa nos regala el compás más puro de Jerez hilvanado con las guitarras de Parrilla y Moraíto.

Su tercera aproximación al estudio llegó seis años después, esta vez con Ricardo Pachón. 'Jerez. Xères. Sherry' (Nuevos Medios) supuso una nueva experiencia profesional. Pachón quiso dar un vuelco a su carrera con un disco plagado de arreglos (baterías, pianos y todo tipo de percusiones), con algunos temas especialmente destacables como la bulería 'Adiós tristeza', con un Moraíto sublime.

Y de Pachón a Isidro Muñoz, quien apostó por la jerezana en 'La luna de Tomasa', editado por Senador en 2002. El productor sanluqueño le hizo un disco a su medida y acertó plenamente en su modelaje. Su siguiente disco supuso un reencuentro con Ricardo Pachón, de nuevo para grabar volver a mezclar su flamenquería con piezas de carácter más actual. En él destacan las dos composiciones del añorado Fernandito Terremoto, una de ellas, 'Solo por eso', da título al disco. La última aproximación, sin contar su apartado navideño, fue 'CaiJere', un trabajo colectivo.