La inesperada tala de catorce pinos piñoneros en la zona de Pozoalbero, enmarcada dentro del ámbito geográfico de la asociación de vecinos Palos Blancos ha supuesto un nuevo revés para esta entidad, tan concienciada con la defensa y conservación de la naturaleza de la zona.

El aviso sobre el corte de estos árboles lo dio una vecina, que puso inmediatamente el hecho en conocimiento de la agrupación vecinal. La tala en cuestión se ha realizado en el lugar donde irá ubicado el futuro conjunto residencial Maestrante, llevado a cabo por la empresa municipal Emuvijesa.

Jesús Palomo, presidente de la asociación de vecinos Palos Blancos, considera que esta actuación está "totalmente injustificada, pues unos árboles centenarios como estos, que estaban en buen estado, no se pueden eliminar así como así y sin previo aviso". Aunque puntualiza que "es comprensible la tala de los dos o tres pinos que copaban la entrada a lo que sería el parking del conjunto residencial, pero hay muchos de ellos que se podrían haber salvado".

Además, califica de "ilógica esta tala cuando a los pocos días, ante la queja de varios vecinos, se han plantado tres olivos para reparar el daño realizado e incluso los han puesto más cerca de las futuras viviendas de lo que estaban los pinos, no se entiende".

Ante la reclamación por escrito realizada a la delegación de Medio Ambiente del ayuntamiento, ésta ha respondido a la asociación afirmando que "la zona afectada fue calificada en el Plan Parcial de abril de 2006 como Suelo Urbanizable Sectorizado" y que el corte de estos pinos se ha debido a la "incompatibilidad de la conservación de la totalidad de los árboles con la ejecución del proyecto, por lo que la Delegación autorizó la tala de 12 pinos, pidiendo como compensación a la empresa promotora (Avisur construcciones) un total de 120 árboles de calibre 14/16 centímetros y en buen estado fitosanitario para utilizar en la próxima campaña de plantación en la ciudad".

A Palomo no le ha convencido este cambio, que califica de "ridículo, porque es como si quisieran compensar un Dalí o un Picasso con varios cuadros pequeños de mucho menos valor. No es lo mismo". Ante esta tesitura, desde Palos Blancos se pide al consistorio que "por lo menos, algunos de estos árboles se planten en la zona".

A un problema similar se enfrentó esta asociación de vecinos hace un par de años cuando una empresa de construcción pretendía talar un brachichito o 'árbol botella' situado en la avenida del Altillo, que finalmente acabó por perderse.

Por otra parte, Palomo recordó que una de sus antiguas reivindicaciones, la de instalar un apeadero de Cercanías en el parque Atocha -situado junto al puente de San José Obrero-, sigue en pie. La modificación del trazado ferroviario por la llegada del AVE ha sido considerada por Palos Blancos como una buena ocasión para que el ayuntamiento se plantee esta medida, que supondría "un gran avance para la zona, en la que hay espacio de sobra para el apeadero y para los aparcamientos".