Y ahora sí, hablemos de fotografía, un año más, desde esta página que Diario de Jerez tiene el acierto de difundir y yo el privilegio de coordinar para ustedes. Y no podemos hacerlo de otra forma que mirando por el retrovisor al último verano. Ha sido un verano de reiteraciones, o 'remakes', como diría un Erasmus, y me explico. Las principales apuestas expositivas de estos últimos meses ya las conocíamos, e incluso han sido traídas a esta página, por haberse expuesto en otras ciudades o aquí parte de ellas. Como es el caso de Sanro y su trabajo 'Almadraba'. Un trabajo del que ya conocimos una parte, pero que la Sala de arte 'Damajuana' nos hizo el regalo en el mes de julio de mostrárnoslo en su totalidad. Admirable, como siempre, la ilusión que Sanro (Manuel Sánchez Quirós) pone en todo lo que hace. Y el resultado es un documento gráfico de gran valor antropológico y fotográfico, donde quedan reflejadas, de forma absolutamente plástica, las labores milenarias de la pesca del atún frente a las costas de Barbate y Zahara.

Dos auténticos 'remakes', pero no por ello pierden, en absoluto, un gramo de su enorme valor artístico, han sido las exposiciones en Cádiz de Cristina García Rodero 'España oculta' y 'Sin conservantes ni colorantes' en la Sala Rivadavia de Diputación.

De la primera ya hablamos en esta página en su impresionante montaje del Palacio de Diputación de Sevilla. Traída a Cádiz por su Ayuntamiento y la Obra Social de La Caixa.

La segunda también fue vista con anterioridad en Pescadería Vieja de Jerez. En ella, nuestro compañero y amigo Bernardo Palomo conseguía reunir a diferentes artistas femeninas y sus particulares puntos de vista, entre las que se encontraban Patri Diez o Mercedes Santos.

El verano toca a su fin y e el Club Nazaret, de la mano del experimentado fotógrafo José Luis Medina, nos lleva a un recorrido por sus últimas creaciones artísticas, muy en la línea de las satisfacciones que el autor nos tiene ya acostumbrado.

Y por último mencionar a dos compañeros que nunca dejarán de sorprendernos fotográficamente, Lola Maró y Tato Cirera, y su trabajo 'Angelus y Vigilis' que ha podido verse en la Sala 'La Polaroid' de Julián Ochoa en San Fernando. Una sala de escasos metros cuadrados pero que se va convirtiendo en una autentica catedral de la fotografía. De la exposición no les voy a hablar, tan sólo les reproduzco una muestra en esta página, con la esperanza de que pronto les pueda contar con más detalle porque sea expuesta en una sala de Jerez.

Si estamos todavía a tiempo de ver la exposición de Jesús Botaro, en la sede de la Agrupación Fotográfica San Dionisio, 'La mirada de Camboya'. Esta tarde precisamente el autor dará una charla sobre el trabajo expuesto.

Pido disculpas por las cosas que por olvido se me puedan quedar en el tintero, ya que sin duda ha habido más.