Juan Carlos Andrades. Diseñador gráfico

Cómo trabajar y optar a premios sin salir de casa

  • El diseñador jerezano, de 29 años, colabora con empresas nacionales e internacionales desde su propio domicilio

 Los tiempos cambian, y gracias a los avances tecnológicos cada vez son más las personas que tienen la posibilidad de disponer de su despacho y desarrollar su actividad laboral en su propio domicilio. Es el caso del diseñador gráfico jerezano Juan Carlos Andrades, que oculta su nombre tras el seudónimo Fungers, que con tan sólo 29 años trabaja con empresas catalanas y rusas sin desplazarse de su casa. En estos momentos, el joven opta a un premio de una importante web americana llamada Creative Allies a la que  acuden artistas de talla internacional para buscar todo tipo de ayuda en torno al diseño gráfico.

-¿De qué trata la web Creative Allies?

-Es una web americana en la que grupos musicales acuden para que diseñadores gráficos les hagan carteles promocionales, portadas de discos... Todos los que estamos registrados presentamos nuestros proyectos y ellos, en primera persona, deciden cuál les gusta más. En algunas ocasiones, si hay muchas propuestas buenas se somete a votación en Facebook o alguna otra red social.

-¿Qué grupos han elegido algún proyecto suyo?

-El más importante fue Blink-182. También he trabajado para Meiko, una cantautora que se hizo famosa por poner la música en la serie Anatomía de Grey o Chris Corner, músico y cantante británico que fundó la banda Sneaker Pimps. 

-¿Qué opciones propone entonces con respecto a otras webs similares?

-En otras páginas, cuando ganas concursos te dan un diploma o un título que al final sirven de poco. En esta son claros y desde el principio ponen las cartas sobre la mesa. Presentan el proyecto y el dinero que van a dar por él, que depende de la magnitud del proyecto. A veces se ganan 400 ó 500 euros por trabajo.

-Y además, usted está nominado a diseñador del año. ¿Cómo se siente?

-Sí. Una vez terminado el año se eligen los diez mejores diseñadores y entran en un concurso para elegir al ganador. En esta ocasión, estoy entre ellos y es un verdadero orgullo.

-¿Se ve con posibilidades de ganar?

-¡Eso nunca se sabe! A finales de este mes ya eligen al premiado, que ganará un viaje a Alabama.

-Y todo sin moverse de casa, ¿qué más proyectos tiene ahora mismo en cartera?

-Pues sí, todo desde mi casa (risas). En la actualidad trabajo con una empresa catalana que recicla vasos y los vende en festivales musicales. También una empresa rusa ha empezado a usar uno de mis logos, pero sobre todo hago exposiciones. La última se mostró en el Festival de Flamenco, donde expuse ilustraciones de figuras célebres del cante, como Camarón.

-¿Un trabajo del que se sienta especialmente orgulloso?

-Todo el diseño de la portada y libreto del último trabajo de Los Delinqüentes es un proyecto mío. Fueron dos meses de trabajo intenso, porque es un trabajo muy mimado y meticuloso. Trabajé mano a mano con el hermano  de uno de ellos y quedó un resultado genial.

-Su trabajo es de esos en los que hay que estar todo el día pensando.

-Hay que mirar siempre la realidad desde el punto de vista del diseño, intentando darle la vuelta. Mi novia, cada vez que me ve callado, ya salta con un "¡qué estará maquinando ahora!". Ha habido hasta veces que por la mañana me he levantado con la mano puesta como si estuviera dibujando en la tableta gráfica. Agota mucho mentalmente.

-¿Nunca ha sentido la necesidad de parar?

-De hecho, hice un parón hace dos años. Me bloqueé debido al poco reconocimiento de esta profesión en la provincia y a la irregularidad a la hora de pagar. Fue un shock para mis amigos y familia, porque paré de repente y me fui a la fábrica de botellas. La verdad es que me sirvió, porque mientras envasaba volvía a pensar en el diseño, y muchos bocetos me han servido para trabajos posteriores.

-Díganos, ¿dónde ve su futuro?

-Tal como está la cosa, no me puedo quejar. Eso sí, si tuviera que irme fuera de mi domicilio, tendría que ser con una oferta clara y tentadora. Me encantaría conseguir de 3 a 5 clientes más por todo el mundo y seguir trabajando como hasta ahora, lo que también me daría la oportunidad de viajar y desplazarme si hiciera falta.

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