Carlos Fontana ya no es entrenador del Xerez CD. El técnico mantuvo anoche una reunión con Vicente Vargas, director deportivo azulino, y abandona, de mutuo acuerdo, la entidad por motivos familiares y de salud. El preparador argentino, que firmó por el club xerecista el pasado 16 de agosto, sólo ha dirigido al equipo dos encuentros -Cádiz B y Xerez DFC-, que se han saldado con sendas derrotas. 

El club busca un nuevo entrenador, aunque es complicado que lo cierre antes del choque que el Xerez CD debe disputar el domingo, a partir de las siete de la tarde, frente al Ciudad de Lucena en tierras cordobesas.  Por el momento, Eli, entrenador de los porteros, y Salvador Vadillo, preparador físico, estarán al frente de la plantilla.

El club confirmó la noticia a través de un comunicado pasadas las diez y media de la noche: "Tras reunión celebrada en la noche de hoy el Xerez Club Deportivo y Carlos Fontana han decidido de mutuo acuerdo rescindir el contrato de este último.

Destacar que Carlos Fontana no puede continuar en el banquillo xerecista por motivos de salud y que ha renunciado a recibir cualquier tipo de compensación económica.

El entrenador da las gracias a la plantilla, al resto del cuerpo técnico y sobre todo a los Hools y a la afición por el trato recibido en todo momento.

Desde en Xerez Club Deportivo agradecemos a Carlos Fontana su profesionalidad y dedicación absoluta en el tiempo que ha estado al frente del primer equipo y le deseamos la mayor de las suertes tanto profesional como personalmente".

Fontana, muy afectado tras la reunión, no entró en demasiadas valoraciones pero sí quiso dar las gracias públicamente a todos por el apoyo que recibió desde el primer día que llegó a la entidad. "Me marcho voluntariamente por problemas de salud. El domingo lo pasé muy mal antes, durante y al final del partido, yo tengo una forma de vivir el fútbol muy pasional y me sentí angustiado y dije hasta aquí, así es mejor no seguir porque me va a dar algo. Eran las siete de la mañana del lunes y todavía estaba despierto. Yo me lo tomo todo de forma tremenda y me estaba resultado complicado".

El preparador argentino añadió: "Quiero dar las gracias a todas las personas que han trabajado conmigo durante este mes. Me marcho muy agradecido al club por su confianza, a Vicente Vargas por el trato que ha tenido conmigo, a los jugadores por su entrega y su predisposición al trabajo, a mis dos ayudantes, Vadillo y Eli, por su profesionalidad y respaldo en todo momento, a la gente del club y, por supuesto, a la afición por el cariño. Para mí fue un orgullo que una entidad con tanta historia, a la que pertenecí como jugador, confiara en mí para este proyecto. Insisto, me marcho de forma voluntaria por lo que sufrí el domingo y no me llevo ni un euro. Hay gente trabajando mucho por sacar adelante este proyecto y yo no voy a crear ningún tipo de problema, todo lo contrario. No me llevo ni un pero y le deseo lo mejor en el futuro porque el Xerez CD lo merece".