Sindicatos del hospital volverán este viernes a salir a la calle en una concentración a las puertas del centro para denunciar la situación de inseguridad de los trabajadores sanitarios tras la nueva agresión del pasado sábado en Urgencias. Una paciente atacó a un médico, un residente y a un vigilante sólo una semana después de que un usuario de Urgencias agrediera a otro trabajador de la seguridad privada del área.

Los sindicatos consideraron ayer que los agresores se ven impunes a la hora de atacar al personal sanitario, a pesar de que la agresión física o intimidación grave contra estos profesionales en el ejercicio de su función pública asistencial viene siendo considerada como delito de atentado por los tribunales de justicia. Sin embargo, y como denunciaron ayer desde el Sindicato Médico, "sale más caro aparcar en doble fila que agredir a un sanitario". "Hay un grave problema de educación, de sensibilidad. Habrá que hacer más campañas sobre esto porque el problema cada vez es mayor y hay profesionales que ya no quieren ir a determinadas áreas o centros", señaló Juan Benjumeda, desde el Sindicato Médico. Asimismo, desde este colectivo consideraron que el plan de actuación tras una agresión hay que reforzarlo y proponen, por ejemplo, "identificar a un paciente que tenga sentencia firme por agresión a un sanitario o que también la pena sea administrativa". Por último, el sindicato reconoció que los ya frecuentes episodios de violencia en los hospitales provoca que "la plantilla tenga miedo e impotencia".

Desde el CSIF, que también secundará la concentración prevista a final de esta semana, subrayaron que "el SAS pone medidas de seguridad pero está visto que no son suficientes. Y la prueba son las últimas agresiones que evidencian que hay que hacer algo más". "Queremos reunirnos con la gerencia porque los protocolos que se activan siempre son posteriores a la agresión. Si estos actos estuvieran más castigados quizás serviría para frenarlos", remarcaron desde el sindicato.

Los sindicatos animan a la dirección del área sanitaria -"que suele siempre acompañarnos en estos actos", subrayan-, a asociaciones vecinales y otros colectivos de la ciudad, así como a la ciudadanía en general a sumarse a la concentración del viernes.