El pasado mes de mayo, Manuel Perdigones, conocido en la ciudad por haber sido durante muchos años jugador y entrenador del Xerez C.D., asumió el cargo de presidente en el Club Nazaret. Aquí, su primera entrevista en el mejor momento para la sociedad, en pleno verano.

-¿Cómo han sido estos meses al frente de la institución?

-Desde el principio con mucho acelero, porque nada más salir se nos venía encima la campaña de verano con todo lo que eso conlleva. Este año hemos realizado por primera vez una bolsa de trabajo con socios, que son los que están haciendo de socorristas, por supuesto acreditados. Hemos ido sobre la marcha con muchas horas de reuniones pero con mucha ilusión.

-¿Entró en el cargo con algún objetivo marcado?

-Evidentemente, tanto la junta como yo tenemos mucha ilusión por hacer cosas importantes, lo que ocurre es que el Club, sin estar mal no goza de su mejor momento económico, por lo que vamos a tener que esperar un poquito más a que esta dinámica cambie. Intentamos aprovechar al máximo cada euro, le damos mucha productividad para que el socio venga encantado, con ganas de tener actividades, de pasar un buen rato y que se encuentre con unas instalaciones magníficas.

-¿Qué le impulsó a presentarse como presidente?

-Éramos una serie de socios que no estábamos de acuerdo con la forma de gestión del Club y nos presentamos para intentarlo nosotros. Sabíamos que era algo muy complicado porque la anterior presidenta, Carmen García Galisteo, venía de cuatro años de mandato en el que estaba yo con ella, aunque una serie de compañeros dimitimos en noviembre al no estar de acuerdo con algunas cuestiones. Bueno... sabíamos que había que derribar muchos muros, pero también caen y nos metimos en este 'embolao' que asumimos con total ilusión y tranquilidad.

-El mantenimiento del club será uno de los aspectos más a tener en cuenta.

-Hay alrededor de 40 trabajadores fijos además otros que son discontinuos. Esto necesita mucho personal y afortunadamente contamos con una plantilla muy profesional, con la que estamos súper contentos ya que dan el 100% de ellos mismos. Eso nos hace tener esa tranquilidad que nos respalda.

-¿Alguna vez se ha dicho aquello de 'Manolete, para qué te metes'?

-No, aunque hay momentos donde estás un poco agobiado porque se te viene todo encima y me lo he planteado, pero de inmediato vuelvo a la realidad y veo que esto lo hicimos porque somos un grupo de socios que queríamos trabajar por el club, cambiar su forma de gestión y enseguida nos ponemos las pilas y estamos de lleno.

-Alrededor de 3.000 familias están apuntadas actualmente al Club Nazaret, ¿se ha notado mucho la crisis?

-De hecho, desde que empezó la crisis ha habido un 10% de socios menos. Afortunadamente ya tenemos unos números que nos dan esperanza porque este año no se han producido bajas importantes. Anualmente teníamos sobre las 80 o 90 bajas y este año no ha habido, hemos derribado ese número. Por contra, desde que hemos entrado ha habido 54 altas, lo que nos invita a ser positivos.

-En estos meses de verano, los protagonistas absolutos son los niños, ¿qué le hace más ilusión de trabajar para ellos?

-Sobre todo ver cómo disfrutan en cada actividad. Hemos terminando el campeonato de fútbol total y nada más que hay que ver las caras cuando reciben las medallas, para ellos es como si hubieran ganado la Champions. Estamos buscando un abanico amplio de actividades que antes no se hacían para los niños, aunque no nos olvidamos de las otras edades, tenemos campeonatos de pádel, petanca, minigolf, cartas... Aunque los pequeños son los socios futuros y los que terminan aglutinando a la familia. A nosotros no hay cosa que más nos guste que ver las instalaciones llenas de socios porque eso te da vida y alegría. En invierno tenemos cierta tristeza porque la temperatura te hace tener menos público, pero bueno, estamos en una época para disfrutarla.

-¿Tienen competencia?

-Sinceramente, y no por ser clasista ni nada, entiendo que el Club siempre ha sido un espacio de referencia tanto a nivel local como provincial, andaluz y si me apuras incluso nacional. Lo que intentamos mantener es su señorío dentro de nuestras posibilidades. No creo que haya una sociedad tan importante y con tantos integrantes como el nuestro.

-¿Club Nazaret o el Xerez?

-Ambas cosas tienen su responsabilidad. Hombre, está claro que cuando fui jugador y posteriormente entrenador era mi profesión y había que asumirla. Aquí entro porque tengo ganas de trabajar y hacer cosas con mucha ilusión. No deja de ser complicado porque estamos hablando de 12.000 personas aproximadamente a las que contentar, pero se afronta con ilusión y, evidentemente, nos equivocaremos e intentando solventar esos pequeños problemas para hacer feliz a todo el que podamos.