El PP mostró ayer su satisfacción por la decisión del Gobierno andaluz de entrar en el accionariado del circuito, operación para la que, sin embargo, reclamó que se haga con "luz y taquígrafo", "sin trampa ni cartón".

Sobre la transparencia de la operación, la portavoz del PP, María José García Pelayo, recordó que el acuerdo de Consejo de Gobierno andaluz publicado en enero de 2006 establecía cuatro condiciones para la entrada de la Junta en el accionariado, a saber, que se materializara la ampliación de capital, que se diera a conocer el estado financiero de Cirjesa -empresa que gestiona el circuito-, así como la elaboración de un plan de viabilidad y acuerdo sobre el modelo de gestión, aspectos los dos últimos que los populares desconocen si se han cumplido.

En cuanto a la solicitud de que la opción de compra se materialice "sin trampa ni cartón", Pelayo explicó que "la Junta ha esperado a la recalificación de los suelos de los aledaños para entrar en el circuito", por lo que "esperamos que no venga a hacer negocio, porque los jerezanos hemos puestos muchísimo dinero para financiar el circuito, y lo hemos hecho solos durante muchos años".

"Nos huele a chamusquina que la Junta venga ahora que se ha reclasificado un suelo que era de equipamiento público y que se va a convertir en equipamiento privado para uso de ocio, hotelero y comercial". indicó Pelayo tras aclarar que aunque lícito, "no sería éticamente correcto que venga a llevarse ahora lo que a los jerezanos nos ha costado tanto".

Pelayo lamentó igualmente que "la Junta haya llegado tarde y mal", al tiempo que insistió en que "con la entrada se despejen muchas incertidumbres" ,pues "nos gustaría conocer el plan de viabilidad, el modelo de gestión y qué equipamientos privados de uso hotelero, comercial y de ocio tienen previsto Junta y Ayuntamiento abordar en este suelo". En definitiva, apostilló la portavoz popular, "lo que no queremos es que nadie se beneficie de lo que es de los jerezanos".