El Ayuntamiento de Jerez volverá a acogerse a otra línea de crédito habilitada por el Ministerio de Hacienda para hacer frente a sus pagos. En la mañana de ayer, el pleno municipal aprobó solicitar un préstamo de 26,4 millones de euros para afrontar obligaciones que cuentan con sentencia judicial en contra, la mayoría con empresas que gestionan o han sido concesionarios de servicios públicos de mayor coste como la recogida de residuos o los autobuses urbanos. La propuesta contó con el apoyo de todos los grupos de la corporación municipal salvo de Izquierda Unida, que se abstuvo.

Con esta son 12 las líneas de crédito a las que se ha acogido el Ayuntamiento desde que el Gobierno central habilitara en 2012 el primer fondo para tratar de ayudar a las entidades locales con problemas financieros. Desde entonces, el importe total suscrito mediante préstamos a un bajo interés (ronda el 1%) supera ya los 563 millones de euros, de los que a final de año aún quedarán por devolver unos 510 millones. El crédito aprobado se destinará para el pago de fallos judiciales pero el presupuesto municipal de este ejercicio contempla en los próximos meses la suscripción de nuevas operaciones similares por otros 30 millones para afrontar las devoluciones de créditos de años precedentes.

El grueso de esta deuda terminará de devolverse entre 2025 y 2027 aunque los préstamos de mayor importe tienen vencimientos hasta 2032 y 2034. No obstante, es más que previsible que el Ayuntamiento opte por seguir refinanciando año a año estas devoluciones para tratar reducir las cuotas; no en vano, el Consistorio destinará este año un 15% de su presupuesto solo a pagar obligaciones con los bancos.

Hay dos grupos diferenciados en las 12 líneas de crédito a las que se ha acogido el Ayuntamiento en estos últimos cinco años. Por un lado, están los tres créditos que se acordaron entre 2012 y 2013 para liquidar facturas y que proceden del denominado fondo para la financiación del pago a proveedores. De este, Jerez utilizó unos 398 millones de euros. Mientras, en 2014 se habilitó el fondo de ordenación que permite suscribir préstamos para atender vencimientos de créditos, recibir anticipos de los ingresos estatales o pagar sentencias.

En el debate plenario donde se aprobó el nuevo 'rescate', que según el ejecutivo no conllevará nuevas medidas de reducción del gasto municipal, el delegado de Economía, Santiago Galván, aseguró que el Consistorio se ahorrará con esta medida unos 12 millones de euros en intereses de demora y confió en que la cuantía del préstamo aprobado se pueda reducir en parte en la negociación que se va a mantener con los acreedores. El PP, aunque votó a favor, volvió a ser muy crítico con la gestión económica del ejecutivo. Su portavoz adjunto, Antonio Saldaña, le reprochó a la alcaldesa, Mamen Sánchez, que, por un lado, critique al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y, por otro, se haya acogido en su mandato a siete líneas de crédito habilitadas por la administración central.

Carlos Pérez, de Ciudadanos, advirtió de que el ejecutivo local aún "no ha atajado los problemas de fondo del Ayuntamiento". "Es una medicina para un ayuntamiento que sigue enfermo", sostuvo. Por Ganemos, Santiago Sánchez indicó que, aunque su grupo es crítico con este tipo de líneas, esta dará algo de "aire" a la "asfixia del Gobierno del PP a los ayuntamientos". Finalmente, IU justificó su abstención en su oposición a este tipo de medidas ya que, según Raúl Ruiz-Berdejo dijo,"estamos a mitad de legislatura y no se han explorado otras fórmulas sino que se sigue con el mismo plan donde se prioriza el pago a las empresas que tienen más músculo y se aprovechan de las necesidades económicas del Ayuntamiento".

Por otro lado, en el pleno de ayer también se dio libre a una modificación presupuestaria para contratar a cinco trabajadores en la Delegación de Servicios Sociales -la cuantía procederá de una partida sobrante del dinero transferido al circuito para su reasfaltado- y a un cambio en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para permitir un ligero incremento edificatorio en el hotel que se está construyendo en la antigua sede del Casino Jerezano, en la calle Porvera.