Un adolescente, de unos 15 años de edad, se llevó ayer un gran susto cuando estalló el calentador de gas de su casa mientras estaba en la ducha. El incidente ocurrió en la calle Capacho, de la barriada del Rabanito, de Guadalcacín, sobre las ocho de la tarde. Los vecinos, al oir la explosión, provocada por causas que se ignoran, avisaron a los bomberos y resto de fuerzas de seguridad, que hicieron un gran despliegue. Las primeras informaciones apuntaban a que el menor, que resultó ileso, había quedado atrapado y herido posiblemente. El chico pudo salir por su propio pie. Los bomberos y la Policía Local comprobaron que no se había registrado otros daños.

Por otro lado, los vándalos hicieron de las suyas la madrugada de ayer prendiendo fuego a contenedores de basusura y varios solares en distintos puntos de la ciudad, informó el Consorcio Provincial de Bomberos de Cádiz (CPBC). El incendio más peligroso se produjo en las inmediaciones del campo de La Juventud, ya que el fuego puso en peligro a varios vehículos que estaban estacionados en las cercanías de los contenedores. La rápida intervención de los bomberos, que enviaron siete efectivos ante el posible riesgo, evitó que el fuego se propagara causando más daños.

La guardia del 085 apenas dio abasto durante las primeras horas de la madrugada. Se sucedieron los incendios de contenedores y de basura en solares en puntos como Garrochistas de Bailén, Obispo Cirarda, Manuel Cancela, Historiador Bartolomé Gutiérrez (ambas calles pertenecen a Puertas del Sur), San José Obrero y la calle Titanio. Los incendios no causaron graves daños materiales. El CPBP reconocióque hacía meses que no se vivía en Jerez una oleada de incendios de contenedores como la de antenoche.

Otras dotaciones del mismo cuerpo sofocaron también el incendio de un turismo que se produjo en la carretera de Sanlúcar (A-480) a la altura del kilómetro 24. El suceso ocurrió a las 14.53 y no causó daños personales. Curiosamente, los bomberos tuvieron que acudir de nuevo a San José Obrero, ya sobre las 17.26 horas, pues otro contenedor de basuras era presa de las llamas.