Los líderes de los grupos políticos del Parlamento Europeo (PE) reclamaron ayer la dimisión del presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, por sus declaraciones sobre los países del sur, que dijo gastaban "en copas y mujeres", así como por el hecho de que por tercera ocasión haya declinado acudir a la Eurocámara alegando problemas de agenda.

El presidente del PE, Antonio Tajani, reprobó su actitud y anunció que le enviará una carta para hacerle saber que la Eurocámara "no acepta" su postura "de forma unánime". Tajani apuntó que, aunque el presidente del Eurogrupo "no tiene obligación jurídica" de comparecer ante el pleno, "cuando uno solicita sacrificios tan grandes al pueblo también debe aceptar rendir cuentas ante los representantes de esos ciudadanos".