Recuperar el sonido del gran Manuel Morao y la Orquesta Sinfónica de Jerez es el gran logro del último volumen, el quinto, de la colección Flamenco y Universidad, que fue presentado días atrás en el Centro Andaluz de Flamenco (CAF). El proyecto está enmarcado dentro del plan de colaboración y de apoyo al flamenco que desde hace unos años ha puesto en marcha el gobierno andaluz a través de las consejerías de Cultura y Economía e Innovación y Ciencia. El acto en sí contó con la presencia de la directora del CAF, Olga de la Pascua, la directora de la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco, María de los Ángeles Carrasco, así como Rafael Infantes, coordinador del grupo 'Flamenco y Universidad' y el director de la Cátedra de Flamencología, Juan de la Plata. El compacto, dedicado a esta última institución, recupera el 'Concierto de Jerez' que en 1974 tuvo lugar en el Teatro Villamarta con la guitarra de Manuel Morao y Orquesta Sinfónica de Jerez dirigida por el compositor valenciano Benito Lauret.

Rafael Infantes, impulsor de la idea, recalcó que la labor de la Universidad "debe ser la formación, el fomento de la investigación y la divulgación cultural, como decía Ortega y Gasset, y eso es lo que queremos conseguir con el flamenco que al fin y al cabo forma parte de uno de los patrimonios más ricos de Andalucía". Juan de la Plata, por su parte, recordó que el concierto en sí "se grabó en 1974, aunque previamente se había estrenado en Domecq, en los Claustros, aunque bajo la dirección de Joaquín Villatoro, ya que no pudo asistir entonces Benito Lauret, director musical del Ballet de Antonio. Posteriormente se hizo en Villamarta y fue un éxito y ahora, 36 años después y gracias a Rafael Infantes hemos conseguido recuperarlo". Carrasco destacó que la obra "es un tributo a Jerez, a su tradición artística, a sus artistas y a su importante legado patrimonial", resaltando además la labor de Manuel Morao y la propia Cátedra de Flamencología, "una institución pionera en la conservación y difusión del flamenco". El disco, que no se comercializa y cuya portada es una obra del pintor Gutiérrez Montiel, recorre a través de cuatro pistas, soleá, seguiriya, bulería y repetición y final, el genial e histórico concierto donde la guitarra de Manuel Morao resuena nos hace rememorar una gloriosa época pasada, dentro de las limitaciones sonoras que posee.