Sorpresa y consternación fueron los sustantivos que utilizó ayer en Sevilla, con motivo de la reunión del Consejo Político de Izquierda Unida (IU) para analizar los resultados electorales del 26-J, el coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ante las negociaciones que se están llevando a cabo para formar gobierno. Garzón no dudó en calificar el proceso como un un "juego de trileros" entre PSOE, PP y Ciudadanos.

El portavoz reprochó la muestra de "incoherencia y cobardía" de los socialistas y de la formación naranja al "dar por hecho que gobernará el Partido Popular". Garzón explicó que esta muestra de cobardía se debe a que "si el PSOE no quiere que gobierne el PP debería poner en marcha todos las negociaciones para intentar un acuerdo de investidura de izquierda".

Garzón destacó que su formación está abierta al diálogo si los socialistas y el resto de fuerzas políticas deciden tomar esa vía para evitar que el PP siga al mando. "Pero si el PSOE dice que quiere estar en la oposición es porque quiere que los populares gobiernen. Tienen la opción de intentar una investidura alternativa", insistió Garzón.

Por otra parte, el portavoz de Izquierda Unida hizo una valoración, tras la reunión del Consejo Político del partido, en la que señaló que "hace falta más que nunca una izquierda organizada, movilizada, cuya representación parlamentaria esté al servicio de la mayoría social". Para conseguir este objetivo "es necesario convencer a la ciudadanía de que no cabe la resignación", recalcó el malagueño.

Garzón destacó, también, que España sea el único país de la Unión Europea en el que la ideología de izquierdas cuenta con tanto apoyo entre los votantes. "En España hemos conseguido que se articulen respuestas sobre la izquierda, desde el principio de solidaridad y fraternidad", declaró el coordinador. Este hecho es, según Garzón, "importante" de cara a valorar los resultados de las elecciones generales del 26 de junio, ya que estos plantean "un paso más en la construcción de una alternativa, un paso positivo hacia la mejora de las condiciones de vida de la mayoría social".

Por su parte, el coordinador general de Izquierda Unida en Andalucía, Antonio Maíllo, expresó que la reunión celebrada aporta "fortaleza y trabajo" porque "los problemas de la gente, el deterioro de las condiciones laborales y los conflictos sociales continúan en julio y debemos seguir trabajando", recalcó Maíllo.