Granada cumple 16 meses sin trenes

Hace ya más de un año que Granada vive sin tráfico de trenes. 16 meses de un aislamiento ferroviario absoluto, desde que el Ministerio de Fomento anunciara, en marzo del año pasado, la suspensión del tren de Loja con motivo de las obras del AVE. Esto convirtió a la ciudad en la única capital sin conexiones sobre raíles, lo que para el alcalde, Francisco Cuenca (PSOE), supone "una afrenta histórica a la ciudad y a la provincia de Granada".

El 7 de abril de 2015, nada más concluir la Semana Santa, se cortaba el paso de trenes entre Antequera y Granada para llevar a cabo las obras de la Línea de Alta Velocidad. Durante los siguientes meses y hasta la actualidad, los pasajeros que quisiesen salir de Granada en tren tenían que hacer la primera parte del trayecto en autobús. Para los que querían poner un pie en la ciudad de la Alhambra a través del AVE la historia era la misma: bajar del tren en la estación de Antequera-Santa Ana (Málaga) para hacer la segunda parte del trayecto fuera de las vías del ferrocarril.

Desde el Ayuntamiento se culpa directamente al Gobierno de Mariano Rajoy por hacer oídos sordos a las necesidades granadinas en un "atropello sin precedentes, además de un incalculable perjuicio para nuestra economía y para un sector tan importante como es el turismo", puntualizó el alcalde.

El pasado 21 de junio, el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, se reunía con Cuenca para dar su compromiso de ofrecer una solución a las conexiones ferroviarias en los siguientes 15 días. "Vamos para dos meses sin que se haya dignado a decir nada", lamentó el edil socialista.

Dos días después de la reunión entre Cuenca y Gómez-Pomar, quien en ese momento ostentaba la cartera del Ministerio de Fomento en funciones, Ana Pastor, firmaba el convenio que garantiza la llegada del tren de alta velocidad a Ourense, circunstancia que sirve al equipo de gobierno local para esgrimir que la existencia de un Ejecutivo en funciones en España no es excusa para mantener este aislamiento ferroviario en Granada.

La decisión tomada por Pastor, unida a la falta de alternativas que solventasen el problema ofrecidas en la reunión entre el alcalde y el secretario de Estado, levantaron ampollas dentro del Consistorio y en la Mesa del Ferrocarril. Cuenca adelantó su intención de que, una vez se constituya un nuevo Gobierno, desplazarse a Madrid junto a los agentes implicados en la llegada de las comunicaciones ferrocarriles para "exigir que se ponga fin a esta chapuza y a este despropósito".

Según informó el primer edil, la Mesa del Ferrocarril se reunirá a finales de este mes. Al mismo tiempo, Cuenca volvía a reclamar la unidad de todos los sectores de la sociedad granadina al margen de ideologías políticas. El objetivo principal es recuperar la conexión ferroviaria y la definitiva llegada del AVE a la ciudad, se subraya desde el Ayuntamiento. "Entre todos debemos luchar por lo que es justo, y es que Granada tenga una infraestructura ferroviaria en las mismas condiciones que en otras ciudades".