"Lo sé, es un enorme sacrificio para los funcionarios". Un día después de que el Consejo de Gobierno de la Junta aprobase el Plan de Económico y Financiero que supone un ajuste presupuestario de 3.500 millones de euros, el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, concedió una entrevista especial a Canal Sur Televisión para explicar este paquete de medidas, que incluye una rebaja salarial de los trabajadores públicos -en especial de los funcionarios interinos y del personal laboral temporal- de un 5% de media y un incremento de los impuestos a cambio de no destruir empleo en la administración pública. El presidente de la Junta admitió que los funcionarios, en referencia a los empleados públicos en general, sufrirán la parte más dura del ajuste, del mismo modo que su vicepresidente -el líder de IU, Diego Valderas- respaldo las medidas, aunque las calificó de "dolorosas, pero necesarias". Consciente del rechazo unánime que este plan ha tenido entre los empleados de la Junta, Griñán confió en que mañana viernes, su consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, pueda explicar estas medidas a la Mesa de la Función Pública, donde están representados los sindicatos.

Hoy, el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) dará previsiblemente el visto bueno al plan; un día después, el viernes, se llevará a la Mesa de la Función Pública, y quizás sea entonces cuando se aclare una de las dudas de todo esto: si se tramitará, finalmente, como decreto de ley sin opción de audiencia a los afectados. IU, a pesar de ser socio de Gobierno de los socialistas y de aprobar el paquete que busca la consecución del 1,5% del déficit, anunció enmiendas en el Parlamento, aunque Griñán restó gravedad a ello: lo consideró lógico y aseguró que, posteriormente, se negociaría con los parlamentarios de la federación de izquierdas.

Pero el mensaje que transmitió el presidente en la televisión pública andaluza es el mismo que el que ya lanzó su consejera de Hacienda: se sacrifica el sueldo de los empleados a cambio de que no haya despidos y de que no se privaticen servicios en la educación y en la sanidad. En el paquete de recortes salariales, lo más importante es la rebaja del salario y de la jornada laboral en un 15% a interinos y personal temporal de las empresas públicas y la eliminación de los complementos de las pagas extraordinarias de junio y diciembre a todos los trabajadores. El cálculo esgrimido por la Junta es que al aumentar el horario de los funcionarios, por una norma del Gobierno central, de 35 a 37,5 horas semanales, sobrarían 30.000 empleos, y eso es lo que pretenden evitar. Eso sí, hay eventuales que sí saldrán de la Junta cuando se les acaben los contratos, como viene sucediendo desde hace dos años. Griñán sí reveló que la Consejería de Educación contratará a 5.000 interinos menos de lo previsto ya que aumentan las horas lectivas, por otro real decreto del Gobierno, aunque entrarán unos 3.000. El presidente también mantuvo que los cargos políticos que dejen su puestos como consecuencia de la reducción de la administración provincial de la Junta deberán "volver a sus puestos de trabajo". "Lo bueno de los cargos políticos es que tengan una profesión al margen de la política", añadió sobre la reducción prevista de delegados provinciales de la Junta.

En el caso de la subida del impuesto del IRPF, que afecta a quienes declaren bases de más de 60.000 euros, el presidente de la Junta mantuvo que de los tres millones de andaluces que presentan su declaración, sólo el 1,7% sobrepasan esa cantidad. "Dígame, si eso es clase media, no lo es", mantuvo Griñán ante Mabel Mata, la periodista que lo entrevistó en televisión. La Junta estableció el martes dos tramos autonómicos del IRPF cuando antes había tres, y los declarantes entre 60.000 y 80.000 euros son los más perjudicados, al subirles dos puntos el tipo. De 80.000 euros hacia arriba, es de un punto. Con la subida aprobada en el IRPF, Andalucía pasa a tener el tipo marginal más alto para las rentas superiores (base liquidable, en realidad) a los 300.000 euros, que pagarán un 56%. A los que declaren entre 60.000 y 80.000 euros se les aplica un gravamen del 49%, incluidos los tipos autonómicos y estatal.