"Los recortes de obra pública de la Junta pueden dejar otros 25.000 parados"

-La obra pública es la gran damnificada de los recortes estatales y autonómicos. La Junta redujo a cero la obra pública nueva en su último plan de ajuste. ¿Cómo les afecta?

-Afecta a las empresas que están cada vez en peores condiciones y con problemas importantes, porque vivimos de hacer obras y si no se hacen obras, no tenemos futuro. Ahora ha llegado este pequeño respiro del cobro de los ayuntamientos. En cuanto a los profesionales, cada vez son más los afectados, porque las empresas prescinden de ellos e incluso los profesionales libres se están quedando sin trabajo. Esto es más de lo mismo y llueve sobre mojado.

-¿De qué cifra de afectados estamos hablando?

-Con el recorte de 571 millones de los Presupuestos andaluces de este año, calculamos que otros 13.000 puestos de trabajo se van a perder. Eso sería en condiciones puras pero, como el recorte está cayendo en una situación ya de por sí grave, la cifra final en el sector puede subir con toda seguridad a 20.000 o 25.000 parados. Porque ya no es sólo los empleos que directamente dejan de crearse o se destruyen por esa falta de inversión, sino los indirectos que hay alrededor. En el ámbito exclusivo de la Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos, el paro ha pasado del 0% al 14% en Andalucía desde 2008 entre los colegiados y la actual parálisis inversora elevará otro 5% esta tasa en la comunidad.

-¿Cómo llegan a esos cálculos?

-Para que se haga una idea, por cada millón de euros que se invierte en obra pública, aproximadamente, son unos 13 puestos de trabajo directos y 10 indirectos los que se crean. Ésa es la realidad, porque no sólo es que hay obras que no se hacen, también hay obras que se están reprogramando en plazos y otras que avanzan a una velocidad de crucero muy baja.

-¿Tiene noticias de cómo se va a reajustar el plan de infraestructuras andaluz (Pista), que ahora tiene como horizonte 2020?

-No. Estamos expectantes con la nueva consejera y la nueva consejería, a la que le han cambiado el nombre para quitarle el de obras públicas. Nos tememos lo peor. Cuando al director general de Carreteras le van a llamar director general de Infraestructuras nos tememos que el reajuste sea importante. Me temo que la obra pública pueda estar fuera de la cabeza de este Gobierno ahora mismo. Pedimos a la administración que pruebe un año a invertir en la obra pública para que vea que el paro disminuye. Cuando se hace algo mucho tiempo y no sale bien, a lo mejor hay que probar algo distinto.

-¿Qué le parece el mensaje de la nueva consejera de Fomento, de IU, sobre poner la prioridad en el eje transporte público-peatón-bicicleta?

-Lo del peatón nos parece muy bien, pero nosotros pocas obritas le vamos a hacer al peatón. Tampoco las bicicletas nos dan de comer. Y el transporte público, si de verdad se hace una buena gestión con las obras pendientes de metro y tranvía, y se estudia seriamente la viabilidad sería importante. Evidentemente nos vendría bien, por ejemplo las líneas de Metro que quedan en Sevilla y completar Málaga, y no digamos si se hace algo de Alta Velocidad y carriles preferentes para transporte público de acceso a las ciudades.