Antonio Maíllo llamó ayer a los andaluces a dar la "gran sorpresa" que le niegan las encuestas electorales y "rebelarse contra la vieja política" que representan PSOE y PP, "los aliados de los poderosos". En el cierre de campaña celebrado en El Fuerte de Isla Mágica, ante unos 3.000 asistentes y acompañado de los líderes nacionales Cayo Lara y Alberto Garzón, el candidato de Izquierda Unida a la Presidencia de la Junta aseguró que se siente "muy capacitado" para ser elegido tras "competir dialécticamente" con los aspirantes del PSOE, Susana Díaz, y del PP, Juan Manuel Moreno.

Los dirigentes de IU están convencidos de que los debates en televisión han elevado no sólo el nivel de conocimiento de su candidato, sino su valoración en contraste con los otros. Maíllo, en su repaso de los "hitos" de la campaña, aludió hasta tres veces a estas retransmisiones, ya que participó en todas, "a 3, a 7 o a 3". En el aire quedó la invitación de la emisora Radiópolis para un debate, ayer mismo, contra la candidata de Podemos, Teresa Rodríguez, que ella no aceptó. "Que vengan los adversarios, que nos los comemos... con pedagogía y buena educación", matizó.

Maíllo ha incorporado a su discurso elevado unos latiguillos de campaña ("Estoy como una moto", expresa para contagiar fuerza), pero sin perder la reivindicación de la "ética de la convicción" o la "reivindicación del pensamiento complejo".

"Las soluciones no son eslóganes, sino desde la reivindicación de la complejidad, IU ofrece un proyecto sólido, no de titulares", expuso. Maíllo se permitió una confesión personal: "Me revienta la gente que habla que parece que somos tontos. Vamos a rebelarnos y a respetar la consideración desde la máxima inteligencia", subrayó.

El candidato, que se presenta por primera vez tras tomar las riendas de la organización en julio de 2013, se mostró convencido de que la campaña ha incorporado "decenas de miles de votos" a IU, "ganando la batalla de las ideas". "Hemos sido los más propositivos frente al pimpampum de los otros", señaló. Recuperó algunos de sus hit de campaña, como la comparación de Díaz y Moreno con Pimpinela y el "ustedes están hasta arriba de corrupción". Enlazó con otra de las ideas fuerza de IU, la "limpieza" con la corrupción y (de nuevo, los debates) el "silencio" de Moreno cuando Maíllo le preguntó por un caso de corrupción. "Ése silencio es nuestro patrimonio", añadió.

Como mensaje final de esta campaña Maíllo apeló a un voto "de valentía" para "volver a dirigir Andalucía" con un símil que se ha repetido en los partidos políticos en la recta final: "Al igual que el 28-F dimos la sorpresa explotando las urnas, vamos a hacerlo de nuevo", concluyó.