El Señor de los Juanillos

Francisco Moray 'Paquito el del Mentidero' se ha convertido en 'El Señor de los Juanillos'. Ayer, tras muchos años al pie del cañón en la festividad, triunfó este popular gaditano al ver cómo era representado por un muñeco que tenía su misma cara. Vamos, que parecía más un ninot que un juanillo lo que el artesano Juandi Aragón había plasmado en La Caleta. Igualito. De lo mejor que se ha podido ver en los últimos años en esta decadente tradición. Paquito aparecía como político del P.A.C.O. (Partido Alegre Caletero Orgulloso). "Si no hay trabajo ni dinero, vota a Paquito del Mentidero", era el eslogan de campaña. De arte.

No fue la única alusión política de la jornada previa a San Juan. En la misma explanada junto al polémico quiosco de la playa caletera, Manolo Torres criticaba con dos toreros la ausencia de plaza multiusos. El toro se llamaba 'Mentiroso' y de kilos... un montón. En este nuevo emplazamiento para los juanillos, que sustituía a la explanada de Paco Alba, el centro de día Cádiz-Caleta parodiaba la inundación de La Viña preguntando por el culpable. Sospechosos, el sacristán de La Palma por no sacar el estandarte y los husillos sucios. Manuel Peinado convertía a 'La Petróleo' en una estrella de 'Se llama copla' y la Federación de Peñas Caleteras exponía a la Tata Pepa, singular cadista, pidiéndole a San Cocutufato que el Cádiz suba a Primera. También el colegio Villoslada mostraba a un escolar dormido maldiciendo el despertador y Eduardo José Mejías la clínica de un curioso psicólogo.

La Diosa Gades, en el juanillo oficial, sufría los efectos del levante en el centro de Día de Mayores La Paz. El de concurso de este centro se dedicaba a la crisis, mientras que el de la avenida Segunda Aguada pedía limpieza en el barrio y la duquesa de Alba protagonizaba el de la asociación vecinal Fermín Salvochea.

El candado de la Asociación de la Prensa no se libró de las llamas en la asociación de vecinos San Carlos, donde se apuntaba que a Teófila Martínez "no la van a echar del Ayuntamiento ni con agua caliente". Los vecinos de El Pópulo, ya en la Catedral, presentaban al superhéroe del barrio, 'Pópuloman' y en el mismo emplazamiento, la entidad vecinal Cádiz Centro criticaba al Ayuntamiento desde la visión de un parado. Sebastián Pérez, entusiasta de esta tradición, 'reconocía' que con la crisis no le había dado tiempo de acabar el juanillo, mostrando muñecos incompletos de cintura para arriba. Fue pasto del fuego Carmen Pastrana, acompañada por la 'Alemana de Canalejas', y la organización del Corpus en el juanillo realizado por Adán Sáinz Cuevas.

Desde las seis de la tarde hasta la medianoche fueron ardiendo los juanillos en distintos puntos de la ciudad. Más fuego, éste artificial, hubo en la despedida desde el castillo de San Sebastián. El día de San Juan nació entre olor a pólvora y gasolina. Los gaditanos esperan que los malos augurios hayan saltado por la ventana... o por el patinillo.