Girl picture | Estreno en Filmin

Las chicas quieren divertirse

Aamu Milonoff, Eleonoora Kauhanen y Linnea Leino en una imagen del filme.

Aamu Milonoff, Eleonoora Kauhanen y Linnea Leino en una imagen del filme.

Cortada con el patrón de estos tiempos líquidos y empoderados, también con las texturas y maneras del cine indie globalizado que no distingue ya entre Texas o Helsinki, Girl picture llega para nutrir la larga nómina de títulos sobre el despertar femenino adolescente a partir del retrato de tres chicas finlandesas y sus cuitas de amor, desamor, sexo y problemas de identidad en un ambiente de clase media y localizaciones de diseño nórdico.

El segundo largo de Alli Haapasalo, no casualmente premiado en Sundance, aborda las nuevas relaciones y el acceso a la vida adulta a partir de las situaciones que unen y separan a tres adolescentes que luchan contra los problemas personales propios de la edad mientras estudian, trabajan en heladerías para ganarse un dinero y van a fiestas de ambiente pijo-hipster: la disciplina deportiva como prisión, el bloqueo emocional fruto de un entorno familiar roto o la confusión y las ansiedades en el acceso a la sexualidad.

Barnizada de tonos de neón, en formato cuadrado y aderezada de una banda sonora a la moda urbana, Girl picture se ve demasiado prisionera de su formato generacional de segunda mano a pesar de sus intentos de franqueza (sobre la identidad de género o las preferencias sexuales), una cinta de circuito festivalero y fácil etiqueta algorítmica que tiende a estandarizar sus asuntos y formas antes que a singularizarlos en el paisaje urbano finlandés. El resultado, previsible y algo tramposo a la hora de dejar a los hombres en un caricaturesco y cómodo segundo plano, termina siendo además algo conservador en su apuesta por las redenciones y el amor clásico ahí donde el poliamor o la fluidez campan a sus anchas.