El murciano Carlos Alcaraz, de sólo 18 años, superó con facilidad al chileno Alejandro Tabilo por 6-2, 6-2 y 6-3 en su debut en el Open de Australia, donde además ha sido su estreno como cabeza de serie en un Grand Slam.

Alcaraz dominó con un imperial servicio después de acumular doce saques directos y contar con un incontestable 80% de los puntos con primeros servicios. Su destreza al saque contrastó con los nervios de su rival, quien normalmente domina sus partidos con potentes servicios, después de que concediera un total de dieciséis pelotas de rotura.

Tras el partido, el jugador español afirmó que "me he sorprendido a mí mismo porque siempre cuesta adaptarse al ritmo de la competición".

Pero lo que sí sorprendió fue su nueva figura, con un cuerpo muy musculado y más parecido al físico de Rafa Nadal que al chaval que irrumpió la pasada temporada. Alcaraz explicó en la rueda de prensa que se había preparado a conciencia durante la pretemporada. "Era algo en lo que mi equipo y yo hemos puesto mucha atención en pretemporada. Queríamos hacer un cambio muy bestia para estar cómodo y tranquilo en partidos largos, sabiendo que podía aguantar físicamente".

Hay que recordar que el murciano se tuvo que retirar en los cuartos de final del pasado Open USA por una lesión en el abductor. A raíz de ahí, el tenista tomó conciencia de que debía ganar en masa muscular para potenciar su físico y adaptarlo para afrontar partidos de Grand Slam al mejor de cinco sets.

Pero no todo ha sido gimnasio. El tenista español, que renunció a los primeros torneos del año, explicó tambien que además de "entrenar mucho, también tienes tiempo para estar con la familia. Aproveché para sacarme el teórico del coche". Un crack.