El Guadalcacín ha abierto la temporada en División de Honor en el Fernández Marchán con un merecido y trabajado empate a cero ante el Chiclana en un partido intenso, muy disputado y que a los locales se les puso cuesta arriba a los 48 minutos con la expulsión de José Roldán. 

El equipo de Galiano, lejos de achicarse con ese contratiempo, se creció, multiplicó los esfuerzos, fue capaz de aguantar las tablas y hasta dispuso de alguna que otra acción para haber dado un susto a los de Lupi, a los que les faltó serenidad y acierto a la hora del último pase y de concretar las ocasiones que se les presentaron. 

El partido arrancó intenso, muy físico, con duelos duros y con un Guadalcacín bien posicionado, que no permitía a un Chiclana con calidad generar su juego, le obligaba a buscar balones largos y no se sentía nada cómodo sobre el verde.

Los azulones, con un once muy diferente al del pasado curso y con la ausencia hasta del meta Migue, que se ha roto el tendón de Aquiles, obligaban a los visitantes a dar un pasito atrás y les creaban peligro.

Los acercamientos se sucedieron en una y otra portería, pero las ocasiones más claras fueron para los locales, que merecieron marcharse al descanso con ventaja. Chuliki, a los nueve minutos, lo intentó con un buen disparo que se le marchó fuera por poco, en el 25' fue Adri el azul que buscó la meta rival y en el 42', obligó a trabajar a Navas al aprovechar un fallo defensivo de los visitantes. Fue la acción más clara de todo el primer acto.

Copero fue uno de los jugadores más destacados del Guada en la medular.

Expulsión infantil

El segundo tiempo arrancó con serios problemas para el Guada, que se quedó con diez a los 48 minutos por la expulsión con roja directa de José Roldán, que reclamó al colegiado un golpe en la cara de un rival.

Galiano tuvo que realizar un cambio para recomponer la defensa, retiró a Cristian y colocó en el centro de la zaga a a Yuni. El calor se dejaba notar, pero los locales no le perdían la cara al encuentro y con diez lo hacían mejor que once.

Chuliki, con muchas ganas, buscando el segundo palo casi abre la lata (55') con un tiro que rozó el larguero y la réplica la puso Cornejo con un centro-chut alto. El Guada no se rendía y forzó un doble saque de esquina que puso en aprietos a un Chiclana que intentaba sin mucho éxito adelantar líneas y a aprovechar los espacios que dejaban los guadalcacileños.

El crono volaba y el calor comenzaba a pasar factura a los dos equipos. Los técnicos seguían dando aire a sus equipos y movían el banquillo. Chuliki, que realizó un gran desgaste en punta, dejó su plaza a Benito. Y Benito se marchó en una contra que Lebrón cortó arriesgando mucho, pero evitó el disparo del punta (86'). El visitante Adri replicó en el área contraria, pero su disparo, con todo a favor, se le escapó cruzada.

Los últimos minutos fueron de tensión y nervios y en el descuento, el Guada no acertó a sacar rédito a una falta próxima al área, mientras el rival se desesperaba por no haber aprovechado su superioridad numérica durante tantos minutos.

Antonio Saldaña y Rafa Mateos posan en la grada con su carnés de socio del Guada.